Tasa básica pasiva registra tercera semana consecutiva al alza

El indicador se ubicará, a partir de este jueves 27 de abril, en 6,68%, desde el 6,64% en el que estará hasta este miércoles. El aumento en el indicador durante la siguiente semana es 0,04 puntos porcentuales (p. p), de acuerdo con el sitio web de la autoridad monetaria.

En las dos semanas previas al nuevo registro, los incrementos en la tasa básica pasiva fueron de 0,02 p. p., al pasar de 6,61% a 6,63%, y el segundo ajuste al alza fue de 0,01 p. p., desde el 6,63%, hasta el 6,64% que regirá hasta este miércoles 26 de abril.

Estas tres semanas de aumentos contrastan con el comportamiento que tuvo el indicador desde principios de marzo hasta las primeras dos semanas de abril, cuando registró cinco semanas consecutivas con una tendencia a la baja, en las que pasó de 6,72% hasta 6,61%.

El comportamiento de la tasa básica pasiva es relevante porque es la tasa de referencia que rige para 700.854 créditos en colones otorgados en el sistema financiero nacional. También tiene un impacto en los ahorrantes, pues el aumento representa mejores rendimientos en algunas inversiones.

En los últimos 12 meses, el indicador se duplicó, al pasar de 2,90% al 6,68% que regirá a partir del jueves. A raíz de esto, los deudores han experimentado aumentos considerables en las cuotas de sus créditos en colones ligados a la tasa básica pasiva.

Este indicador calculado semanalmente es un promedio ponderado de las tasas de interés brutas (sin excluir el impuesto sobre la renta) de la captación que las entidades financieras realizan en el mercado nacional. Para obtener el resultado, el Banco Central saca un promedio ponderado por el monto de la captación de las últimas cuatro semanas.

Los incrementos en la tasa básica pasiva luego de que el Banco Central decidiera elevar la tasa de política monetaria para combatir la inflación, ya que este indicador tiene efectos sobre las demás tasas del mercado. Este último se movió desde 0,75%, en diciembre del 2021, hasta alcanzar el 9%, en octubre del año pasado.

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Así se mantuvo hasta el 15 de marzo, cuando la autoridad monetaria decidió realizar un primer ajuste a la baja de 0,50 p.p. En la última revisión, efectuada el pasado jueves 20 de abril, la Junta Directiva del Banco Central decretó una segunda reducción, esta vez de un punto porcentual, para ubicarla en 7,50%.

Según economistas consultados por La Nación, el viernes 21 de abril, este segundo ajuste a la baja es una señal favorable para los deudores, pues representa un beneficio importante debido a la eventual reducción en las tasas de interés de sus préstamos, aunque esta impacto no sucede de forma inmediata.

Lo anterior ocurre porque indicadores como la TBP mantienen un rezago respecto a la tasa de política monetaria, según habían explicado a La Nación, Melvin Garita, gerente de BN Valores, y Gabriel Alpízar, gerente de Tesorería del Banco de Costa Rica (BCR).

Por esta razón, la tasa básica pasiva es un indicador que se mueve más lento, y el comportamiento del rezago depende de la rapidez con que los bancos, cooperativas, mutuales, financieras y otros participantes disminuyen las tasas que pagan a las personas que depositan su dinero.