Vicente Fernández y su dulce relación con Costa Rica

Hoy 12 de diciembre, en el día de la muerte del gran Charro de Huentitán, recordamos su paso por suelo costarricense, un camino en el que confirmó que aquí fue ‘El Rey’ de la música ranchera. Estos recuerdos incluyen un escándalo por la cancelación de un espectáculo y, por supuesto, su gran presentación en conjunto con su hijo Alejandro Fernández.

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En el 2000, la primera vez

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“Definitivamente el Rey”, así tituló La Nación la crónica del primer concierto de Fernández en Costa Rica. El show reunió a unas 10.000 personas que se juntaron a cantar los éxitos de Chente en el estadio de Pedregal, el 10 de diciembre del año 2000. El recital fue parte de su gira Tour 2000, que promocionaba el disco Lobo herido.

En esa ocasión, a Vicente lo acompañó el Mariachi Chapalán. El cantante interpretó La ley del monte, El Rey, Mujeres divinas, De un rancho a otro, Lobo herido, Hermoso cariño, Me voy a quitar de en medio, De qué manera te olvido y Cruz de olvido, entre otros grandes éxitos.

De ese show se rescata una anécdota muy especial y es que el intérprete bajó del escenario para cantarle un tema a Rodbin Rojas, un joven que estaba en silla de ruedas.

Las empresas Conciertos Internacionales y Two Shows fueron los encargados de traer al Charro a su debut costarricense.

En el 2002, con su hijo Alejandro

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“Los Fernández arrasaron hasta con el pudor de las señoras”, fue parte de la reseña que se publicó sobre el espectáculo, que trajo por segunda vez a Vicente Fernández a Costa Rica. En esa recordada cita venía acompañado por su hijo Alejandro, quienes el 15 de agosto del 2002, para festejar el Día de la Madre, la dupla familiar hizo de las suyas.

El encuentro con la leyenda y su Potrillo fue en el estadio Ricardo Saprissa, un jueves por la noche. Lazos invencibles era el nombre de la gira internacional que padre e hijo realizaron por varios países y que también los trajo al nuestro.

Alejandro fue el primero en subir a la tarima, solo y vestido de charro cantó Quiéreme, un popurrí de Juan Gabriel, Tantita pena y Como quien pierde una estrella. Vicente, por su parte, puso su garganta a todo motor para interpretar Amor eterno, De qué manera te olvido y El ayudante. Los artistas intercalaron su participación en el escenario, pero llegó un momento en el que estuvieron juntos en escena: Volver, volver y El Rey las cantaron juntos en el show producido por la empresa Two Shows.

En el 2009, la cancelación

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La tercera vez que Vicente Fernández se presentaría en el país estaba pactada para el 4 de abril del 2009, pero el encuentro con los ticos nunca se dio. Autoridades del Ministerio de Salud pusieron sellos de clausura en el estadio Ricardo Saprissa, en Tibás, para cancelar la realización del evento. El problema radicó en que, hasta el propio día del concierto, faltaban permisos para la realización del mismo.

Salud llegó en horas de la mañana al recinto tibaseño y, pese a que para ese momento la suerte ya parecía estar echada, la empresa 28 Producciones insistió en que el espectáculo sí se haría en la noche. Los fans de Vicente llegaron a Tibás y al ver que las puertas del estadio se mantenían cerradas y que todo indicaba que no habría concierto, se mantuvieron ahí esperando por entrar al recinto.

Se armó un zafarrancho. El público molesto hasta pateaba las puertas del Saprissa y le tiraban piedras a las instalaciones.

Días después, Vicente pudo sacarse la espinita de no haber cantado el 4 de abril y su voz se escuchó el 28 del mismo mes con un exitoso concierto en el Saprissa. En esa ocasión ofreció un recital de casi tres horas, en el que complació a todos sus seguidores con los mayores éxitos de su carrera.

El 2012 y su adiós de Costa Rica

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Con La despedida, gira internacional de conciertos de Vicente Fernández, el charro mexicano cantó por última vez en nuestro país, el 23 de agosto del 2012. La cita fue en el Estadio Nacional, en La Sabana.

Esa noche las cantantes Rina Vega y Elena Umaña fueron las encargadas de calentar el ambiente en el Nacional, previo a la presentación de Chente. Además, el comediante Opo Marín se sumó a las presentaciones de apertura del espectáculo.

El Charro fue todo un éxito en escena. Esa noche dejó el corazón en La Sabana para complacer a los miles de seguidores que lo acompañaron. “Buenas noches a toda mi familia costarricense; vengo a cantarles por última vez. Quiero agradecer a todos por su cariño, a todos ustedes por ver mis películas, por escuchar mis discos. Esta noche, mientras ustedes no dejen de aplaudir, su Chente no dejará de cantar”, dijo el artista cuando se presentó ante los ticos.

El repertorio hizo un recorrido por temas como Me voy a quitar de en medio, Estatua de marfil, Que te vaya bonito, Lástima que seas ajena, La primera con agua, Acá entre nos, Bohemio de afición, A pesar de todo, Sublime mujer, Si te vas, no hay lío y Por tu maldito amor.

En esa ocasión fue RPM TV la encargada del montaje del show.