Debi Nova ha tenido una carrera en la música digna de guion de película. A los 17 años se marchó sola a Los Ángeles buscando oportunidades y a los meses volvió decepcionada. Tomó impulso una vez más y pronto terminó en la banda del brasileño Sergio Mendes.

Después colaboró con los Black Eyed Peas, grabó su primer disco solista, se presentó junto a Ricky Martin en el Victoria’s Secret Fashion Show, presentó su sencillo Drummer Boy en Dancing With the Stars de Estados Unidos, ganó Dancing en Colombia y un largo etcétera.

Sus logros siempre los celebró como tica pero en otros países y no fue hasta los últimos 5 años que la compositora, hoy de 39 años, ha acortado esas distancias con el país participando en campañas políticas, campañas publicitarias y dando conciertos en plazas y hasta en el bar La Avispa.

¿El motivo de estas visitas más usuales? Su esposo, John Osbourne. Debi Nova se casó en el 2015 con este tico que –por trabajo– debe dejar la casa que comparten en Los Ángeles para visitar el país.

“Mi esposo es de Costa Rica y cada vez más ha tenido que estar aquí. Creo que lentamente estoy haciendo la transición para venir aquí también y es un momento bonito en mi vida para hacerlo”, contó la cantante a Viva.

La entrevista transcurrió en el Teatro Nacional, escenario en el que Debi Nova dará dos conciertos, el 14 y 15 de febrero. Las entradas de la primera fecha se agotaron y la segunda va por el mismo camino, algo que ilusiona a la cantante de Cupido.

En el concierto mostrará su cuarto álbum y lo que viene después de eso es incierto. Puede ser una mudanza inminente, sentarse a escribir un libro de poesía o tener un bebé.

“Creo que cantar y escribir no lo voy a dejar de hacer pues llevo haciéndolo 20 años de mi vida. Sí quiero explorar, tomarme un espacio, me gustaría tener una familia y creo que ya es hora de hacer espacio para eso (risas). Pero sí, no sé qué deparará la vida”, confesó Debi Nova.

En la naturaleza

Debi Nova recorre el escenario del Teatro Nacional con cuidado. Observa el telón y las distintas poleas que lo controlan y estudia el espacio que hay entre el telón y su escenario. “Esta vez venimos con una banda más grande”, dice.

Su banda tiene cinco integrantes, dos coristas y tres músicos, mientras que ella se encarga de los teclados. Como invitado en el Teatro Nacional tendrá al colombiano Juan Pablo Vega, quien produjo su nuevo disco en México.

“Juan Pablo va a estar abriendo el concierto y también me acompañará en una canción. Yo le digo a él que yo le debería estar abriendo el concierto a él (risas), lo admiro muchísimo y de verdad que trabajar con él como productor fue de las experiencias más lindas, como que tenemos un lenguaje muy similar, casi que no le tenía que decir nada, fue muy telepático todo”, recordó la compositora.

En dos ocasiones, setiembre del 2018 y en febrero del 2019, Debi Nova estuvo retirada en el estudio El Desierto, a una hora de la Ciudad de México. Este “CasaEstudio” es un espacio rodeado de naturaleza en el que encontró el tono correcto para contar sobre su vida.

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“Fue lo contrario a Gran ciudad (álbum del 2017) que era más urbano, pero estar en ese entorno natural, ver el jardín cambiar, creo que eso formó mucho el proceso”, aseguró la compositora.

“Han sido años cargado de emociones, fracasos, éxitos, subibajas y de hecho hablará este cuarto álbum mío, de esos ciclos en la vida de cómo pasamos por diferentes estaciones en la vida. A veces estamos en pleno invierno en la vida y todo está seco y frío y a veces es una primavera y las canciones están floreciendo y están fluyendo”, detalló.

Entre los temas que influyeron este disco estuvo “mucha poesía latinoamericana femenina”, en especial las obras de la nicaragüense Gioconda Belli, así como lecturas sobre la condición de la mujer.

Quédate

En sus conciertos en el Teatro Nacional, Debi Nova presentará seis canciones nuevas, incluyendo Quédate, que ya suma 5,2 millones de reproducciones en YouTube en cuestión de dos meses. Pronto Quédate será su sencillo más exitoso, pues está cerca de superar a Drummer Boy (2010) que tiene 5,8 millones de plays.

Esta bachata fue “de esas canciones que salen fácil” y cuando la terminó supo de inmediato que quería cantarla con Pedro Capó.

“En el 2011 conocí a Pedro (Capó). Él acababa de hacer su Primera Fila con Thalía y yo había hecho el Primera Fila con Franco de Vita y hubo un interés de Sony de firmamos como un dueto”, contó Debi Nova del intérprete de Calma.

“Yo me fui para Puerto Rico, nos conocimos, grabamos algunos temas, pero al final del viaje nos vimos a los ojos y nos confirmamos que queríamos seguir siendo solistas (risas). Nos quedó la promesa de que haríamos música en algún momento”, agregó la tica.

Debi Nova tuvo nervios de que Pedro no quisiera participar del tema o no pudiera, pues el éxito de Calma lo mantuvo de gira por todo el continente. Pero al final la colaboración se concretó y grabaron el dulce videoclip en Miami.

Expectativas

Este 2020, Debi Nova cumple 10 años de haber lanzado su primer disco, Luna Nueva, álbum mitad en español y mitad en inglés, en el que se incluyó Drummer Boy. Con esa canción llegó a varios escenarios importantes como el de Dancing With the Stars, pero su éxito no fue la explosión esperada.

¿Qué piensa 10 años después Debi Nova de las expectativas que se depositaron en ella?

“Creo que las expectativas son siempre negativas, concentrarse en expectativas es lo peor que uno puede hacer en la vida y no solo como artista”, dijo con algo de risa nerviosa.

“Creo que hay que aceptar las cosas. Hay una diferencia entre expectativas e intención. En mi caso he sido muy disciplinada y he tratado de que esa intención esté concentrada en mi trabajo y cómo lo puedo hacer de la mejor manera, prepararme, practicar, leer, componer, porque todo lo demás está fuera del control de uno”, agregó.

En el 2014 publicó Soy, completamente en español y luego repitió con Gran Ciudad (2017), dos álbumes en los que invitó a colaborar a grandes del pop como Franco de Vita y Sheila E.

Fue con Franco de Vita que Debi Nova empezó a posicionarse en el mercado latino y desde entonces se ha alejado del pop “puro” y se ha adentrado más en el mundo de los cantautores, colaborando con artistas como Gianmarco, Tommy Torres y Juan Pablo Vindas.

Regreso

Su disco Gran Ciudad fue nominado al Latin Grammy precisamente en la categoría de mejor cantautor o cantautora. Desde ese punto, su cercanía con Costa Rica creció.

Curiosamente, sus últimos conciertos en el país fueron en la Marcha de la Diversidad 2018 y luego, en el bar La Avispa para celebrar este ícono de la vida nocturna gay de San José.

Debi Nova afirma que no tuvo miedo de encontrarse con críticas de tocar en esos espacios ni ofrecer su apoyo a la comunidad LGTBI.

“Lo que me daría miedo es no decir las cosas en la que creo, porque creo que eso es más dañino para uno que decirla; siempre habrá gente que te criticará porque así es la vida (risas). Para mí, como artista, considero sano expresarme libremente de todas las cosas que me apasionan”, aseguró.

“No tengo una experiencia personal más allá de mis amigos que pertenecen a la comunidad, pero creo que eso es suficiente, pues es un tema universal, completamente humano”, señaló Debi Nova.

En esa misma línea, la conversación volvió al nuevo disco, en el que cual habla precisamente sobre las enseñanzas que le ha dejado la vida y se permite reflexionar.

“Yo siempre estoy muy concentrada en lo que viene y pocas veces he sacado el tiempo de decir ‘bueno, logré esto’ y creo que los seres humanos debemos encontrar esas cosas que también hemos logrado”, señaló Debi Nova.

Del cuarto disco sabremos todo cuando tome el escenario del Teatro Nacional. Se espera que sean seis canciones y el título se lo dirá a su audiencia desde el escenario.

“No sé qué va a pasar después de este álbum, pero sí es muy sano después de cada disco tomarse un tiempo para nutrir otra vez el motor, a ver qué sale, si salen canciones, si salen poemas, eso no sé”, aseguró.