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En una mañana soleada pero ventosa, los ahora esposos Glenda Peraza y Byron Garita dieron el sí en compañía de sus más cercanos amigos y familiares.
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Los cerca de 70 invitados asistieron a eso de las 9 a. m. al Hotel Villa Hermosa, ubicado en la Garita de Alajuela
En una entrevista con Viva, publicada este domingo, Peraza habló de su sentir. "Estoy viviendo lo que Dios me dio y me siento bendecida con el Señor. Después de lo que sucedió en mi vida, vuelvo a renacer, vuelvo a construir un hogar con la fe de que Dios nos cubra con el mayor amor posible".
Mientras trataba de controlar la emoción y el nerviosismo propios de una novia a las puertas de la boda, Peraza agregó. "Una de las cosas con las que estoy más agradecida es que Byron es el ser humano en la tierra que me ha hecho sentir más protegida a mí y a mi hija y eso no tengo cómo pagárselo. Le doy gracias a la vida como mujer que soy de que después de mis circunstancias no he estado con nadie más que con él, ha sido mi única pareja y mi único novio y con el que voy a casar", concluyó Glenda el pasado 1 de abril.
Con un vestido tonos champagne corte sirena ajustado con pedrería y su cabello recogido, le dio el sí a su ahora esposo, quien vistió un traje de lino color blanco bajo un árbol que los protegió con su sombra del inclemente sol.
Minutos después de finalizada la ceremonia, tanto los esposos comos sus invitados disfrutaron de un alegre desayuno tradicional de gallo pinto con carnes y frutas. Encuentre más detalles de la boda de Glenda y Byron en la edición impresa de mañana lunes.
