Viviana Calderón y Mauricio Hoffmann tras su primera experiencia en cine: 'Fue retador y enriquecedor'

El 31 de enero se anunció que Viviana Calderón y Mauricio Hoffman serían dos de los actores nóveles de la película Un regalo esencial, del director José Mario Salas.

Ambos ya terminaron de grabar las escenas que les corresponden en la película que trata acerca de un abuelo que en el 2025 le cuenta a su nieto la historia de cómo conoció al amor de su vida en la Costa Rica de los años 80.

Según le contaron a Viva, esta experiencia, en la que Viviana da vida a Jazmín (la protagonista) y Mauricio a Felipe (coprotagonista), “fue enriquecedora”.

Viviana Calderón, presentadora de Buen día, grabó sus escenas durante tres semanas consecutivas. Las jornadas extenuantes la obligaron a organizar su calendario con el fin de poder apegarse al cronograma de la producción de la película.

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“Vieras que ha sido una experiencia linda y enriquecedora. Que me tomaran en cuenta, me honra. Fue algo que se dio..., no sé si Dios me lo puso, pero esto fue algo muy bueno. Me dio otro aire, otra visión, que disfruté de principio a fin. En este proceso aprendí de todos: de producción, el trabajo profesional de cada uno. Fue una experiencia que tiene calificación 100.

“(...) Hubo momentos en los que salía a las 3 a. m. de grabar y pocas horas después iba a Buen día”, contó Calderón.

En medio de su ajetreo, Calderón le dio espacio a la prioridad de su vida: su hija. Aunque su pequeña hija Giuliana no tiene participación en el filme, la presentadora procuró involucrarla al punto de que la niña se aprendió su rol de su madre en Un regalo esencial y eso permitió que mantuvieran su cercanía casi que intacta, gracias al apoyo de su madre, hermanas y del papá de la pequeña.

En esta experiencia, Calderón tuvo la oportunidad de trabajar con su mamá María Cecilia Márquez, quien fue invitada a protagonizar a la mamá de Jazmín.

El reto de convertirse en actriz

Para realizar un cuidado trabajo, la actriz primeriza en cine recibió clases y ensayó junto a sus compañeros.

“Tuvimos días de ensayo. Al ser protagonista tenía más escenas y había que jugar con emociones y orden cronológico. Había que jugar mucho con eso y era complicado. Obviamente trabajé con un actor...; Pablo Rodríguez (su pareja en la trama) nos ayudó montones a sentirnos cómodos", contó.

Además, detalló: "Obviamente el trabajo cuesta; uno quiere que todo se vea real y natural. A veces hay intenciones que no se lograban, pero José Mario Salas nos decía cómo podíamos mejorar todo. Todo tiene su grado de dificultad, pero se logra porque uno tiene esas ganas de que todo salga bien y es humilde para seguir consejos y llegar al personaje que el director quiere. Me encantó ser Jazmín y, en ciertas cosas, me identifiqué con ella y su personalidad".

Acerca de la producción de la película, Calderón asegura que todo fue minucioso, respetuoso y puntual.

“Los ticos a veces pecamos de 'serruchapisos' y buscamos el punto feo en todo. Creo que hay que apoyar la produccion nacional. Mis respetos para José Mario: él tiene gran visión, profesionalismo y compromiso por hacer bien las cosas".

"No es por nada, pero ya vimos un poco de lo que se hizo. Contamos con un director de cámara colombiano, que es buenísimo; se utilizó una cámara muy buena. La verdad es que solo cosas lindas puedo decir de esta experiencia. Se trabajó con mucho amor”, agregó Calderón.

“Siempre me había llamado la atención actuar”

Mauricio Hoffmann, presentador de De boca en boca y Sábado Feliz, se siente satisfecho luego de su participación en las grabaciones.

“Fue una experiencia bonita y diferente a lo que uno está acostumbrado. Tengo años de trabajar en tele y me ha tocado grabar notas o sketches, pero obviamente esto es muy diferente a lo que había hecho. Aparte que aquí tengo que entrar en un personaje y conocerlo. Fue algo diferente, algo retador, algo que había pensado hacer: siempre me ha llamado la atención esto de actuar. Estoy muy contento y satisfecho”, manifestó Hoffmann.

Hacer cine fue lo que creía, mas vivirlo hace que “todo sea diferente”. Su tiempo de rodaje se extendió durante cuatro días.

“Hasta vivirlo se sabe lo chiva que es. Es mucho trabajo. Montando una escena puede durarse hasta dos horas. Estar ahí, grabar una misma escena varias veces, ver como montan el set, las luces, ver cómo ubican las cámaras, es una gran vivencia”, narró.

Hoffmann resalta el trabajo de la producción, la cual procuró darles herramientas a estos famosos sin experiencia actoral.

“Rosibel Carvajal es una actriz excelente; ella nos dio charla y un taller. Con José Mario agarramos las escenas, las leíamos y las empezábamos a ensayar; ahí ibamos masticando un poco más el personaje", explicó.

El actor rescató el apoyo del director y de todo el equipo. "A mí me inducía un poco a hacer lo que él creía era mejor; yo hacía mis anotaciones en el guion porque había que adecuar palabras a la década de los 80; teníamos que tener ese cuidado. Fue bastante retador. Me sentí muy apadrinado por todos. Pablo Rodríguez me ayudó mucho, me decía cómo sentir las emociones. Eso te ayuda mucho”.

Mauricio le agradece a la producción por la oportunidad y también aprovecha para extenderles una invitación a los costarricenses para que se acerquen a ver la película a partir del 18 de octubre.

La otra personalidad costarricense que debutará en cine es Norval Calvo, director de Pelando el Ojo; sin embargo, sus grabaciones apenas comenzaron este 24 de abril.