EscucharLa directora costarricense Valentina Maurel marcó un nuevo hito para el país y para ella misma: este sábado 24 de setiembre, su cinta Tengo sueños eléctricos fue galardonada con el premio Horizontes a la mejor película latinoamericana en el Festival de Cine de San Sebastián, en España. Al momento de dar su discurso, ella le habló al gobierno de Rodrigo Chaves y a la Asamblea Legislativa acerca de los recortes que ha sufrido el sector cultura.
En San Sebastián, ella dijo: “Me gustaría que este premio sea una invitación vehemente al Presidente y a la Asamblea Legislativa para que reconsideren los recortes brutales que le acaban de hacer al presupuesto en Cultura en Costa Rica, porque pone en peligro nuestro cine. Y me encantaría que este premio permita que tengamos por fin una ley de cine, que es urgente y necesaria porque tenemos que estar a la altura de lo que está pasando históricamente en Costa Rica porque el mundo nos está mirando”.
En medio de su celebración, Maurel le contó a La Nación lo que la motivó a utilizar su discurso para hacer un llamado.
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En sus declaraciones resaltó su orgullo por haber recibido un premio en un certamen tan importante. Por ello, decidió alzar su voz.
“En Locarno (en Suiza) estaban todas las nacionalidades confundidas; por eso es que este premio significa que esta película sensibilizó a un jurado especializado en temáticas de América Latina. Por eso, aproveché para hablar de la situación en Costa Rica, que es una situación muy paradójica, en la que hoy en día hay un montón de cineastas que tienen películas en festivales de los más importantes del mundo y en la que el gobierno de Rodrigo Chaves decidió recortar el presupuesto a la cultura, de forma absolutamente contradictoria y en contravía de lo que está sucediendo ahorita”, aseveró.
Valentina Maurel agregó que le pareció importante recordar el trabajo de esta generación de cineastas y de “los veteranos” que lo permitieron.
“Estamos haciendo cine gracias al trabajo de todos los veteranos y bien a pesar del apoyo gubernamental, que debería de estar consciente de que Costa Rica sí es un país que se beneficia de la imagen que proyecta en el exterior y que esto es una herramienta política. El arte y la política van de la mano y creo que ellos podrían beneficiarse de lo que está pasando para alimentar la imagen positiva de Costa Rica en el mundo y, sobre todo, de la región centroamericana”, agregó.
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Recibir este premio también le permitió a Valentina compartir con personas que se alegraron al saber más detalles acerca de la propuesta cinematográfica de Costa Rica y de su cultura.
“La gente que escuchó el discurso estaba muy contenta de aprender un poquito más de lo que está pasando en Costa Rica. La gente asocia a Costa Rica nada más con un país sin ejército, muy pacífico, pero no tienen ni idea de que hay cineastas y que está pasando algo a nivel de cultura”, agregó.
En agosto, en el Festival de Cine de Locarno en Suiza, Tengo sueños eléctricos hizo historia y se llevó tres premios: mejor dirección para Valentina Maurel, mejor interpretación femenina a Daniela Marín Navarro y mejor interpretación masculina a Reinaldo Amién Gutérrez.
