Romper sequías: un desafío frecuente en la Liga

El León de la Liga se levantó de las cenizas más fuerte que nunca y regresó al trono del fútbol nacional para ponerle punto final a una sequía, un hecho que no debería sorprender a nadie.

Sufrir, lidiar con la desesperación y la frustración por múltiples decepciones en la cancha para después desahogarse y dar paso a las lágrimas de felicidad en tiempos de bonanza, ha sido una característica muy marcada en los 101 años de Liga Deportiva Alajuelense.

Eso se comprueba al darle un vistazo a la historia del equipo que se fundó el 18 de junio de 1919 y que siempre ha estado presente en la Primera División, desde que nació el campeonato nacional, en 1921.

Alajuelense sentó las bases de un equipo fuerte, que tuvo que luchar, que era muy aguerrido y que no solo logró su cometido de representar a Alajuela, sino que fue ganando seguidores a lo largo y ancho del país y que esperó hasta 1928 para proclamarse por primera vez monarca del fútbol costarricense.

La Liga volvió a ser campeón nacional en 1939. Es decir, el segundo cetro llegó 11 años después de su primera estrella y en esta ocasión lo consiguió de manera invicta.

Después sumó los cetros de 1941, 1945, 1949 y 1950. Luego vino otro periodo extenso de sequía, porque fueron ocho años sin dar la vuelta, una racha que se acabó para darle paso a su primer tricampeonato, con los títulos en 1958, 1959 y 1960.

La historia se repetía de nuevo, con otra sequía de seis años para luego dar paso a la corona de 1966.

Pasaron cuatro años y Alajuelense volvió a festejar, con un bicampeonato: 1970 y 1971.

Ocurrió lo mismo, pues la Liga esperó nueve años para ser campeón de nuevo en 1980. Transcurrieron tres años y llegó un bicampeonato: 1983 y 1984.

La tónica seguía igual, porque Alajuelense esperó siete años para festejar los títulos en 1991 y en 1992.

Hubo otra pausa y cosechó de nuevo el bicampeonato en los torneos 1995-1996 y 1996-1997.

Dos años después obtuvo el tetracampeonato, con los cetros en fila de 1999-2000, 2000-2001, 2001-2002 y 2002-2003.

Un año después, los erizos volvieron a la cúspide del fútbol nacional en la temporada 2004-2005; para dar paso a otra sequía de cinco años, porque después de eso, la Liga volvió a ser campeón nacional en el Invierno 2010, una racha que se rompió precisamente contra Herediano.

Alajuelense también fue monarca del fútbol nacional en el Verano 2011, Invierno 2011, Invierno 2012 e Invierno 2013.

Desde entonces pasaron siete años. Por el formato de torneos cortos, la espera para el liguismo se ha hecho eterna, pero era algo que no iba a durar para siempre.

La Liga estuvo muy cerca del título hace un año, en el semestre pasado el intento fue fallido, pero esta vez ni siquiera necesitó gran final.

El 20 de diciembre de 2020 quedará en la historia como la noche en la que a puerta cerrada, por la covid-19, el liguismo volvió a tocar la gloria y a festejar, viendo al capitán Bryan Ruiz alzar la anhelada copa 30 que después de tanta espera llegó a la vitrina rojinegra.

RECUADRO

Las grandes sequías de los clubes tradicionales en Costa Rica

• 80 años: Cartaginés (de 1941 hasta la actualidad)
  
• 19 años: Herediano (de 1993 a 2012)
  
• 17 años: Herediano (de 1961 a 1978)
  
• 13 años: Cartaginés (de 1923 a 1936)
  
• 11 años: Alajuelense (de 1928 a 1939)
  
• 10 años: Herediano (de 1937 a 1947)
  
• 9 años: Alajuelense (de 1971 a 1980)
  
• 8 años: Alajuelense (1950 a 1958)
  
• 7 años: Alajuelense (de 2013 a 2020)
  
• 6 años: Herediano (de 1955 a 1961)
  
• 6 años: Saprissa (de 1982 a 1988)
  
• 6 años: Alajuelense (de 1984 a 1991)
  
• 5 años: Saprissa (de 1977 a 1982)
  
• 5 años: Saprissa (de 1957 a 1962)
  
• 5 años: Alajuelense (de 2005 a Invierno 2010)