La actriz Carmen Chinchilla, conocida como Elvirilla por su personaje en Los enredos de Juan Vainas, dice que ha disfrutado inmensamente la experiencia de participar en la quinta temporada de Tu cara me suena (TCMS) y, aunque sus números no son los mejores, aprovecha para divertirse y lograr ganar “aunque sea una vez”.

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Admite estarla pasando de lo mejor, pese a que en las tres galas que lleva el programa ha ocupado las últimas posiciones en la tabla de puntos. Chinchilla dice que no ha sentido presión, pues reconoce que su habilidad no es el canto y así lo tiene claro desde que aceptó este reto. Eso sí, tiene en mente una estrategia que sabe, la ayudará a ganar para beneficiar un proyecto que le cumple sueños a niños en fase terminal.

“Soy muy clara. Desde que acepté sabía perfectamente que mi debilidad más grande es que no soy cantante. No había cantado ni en karaoke por la vergüenza”, admite. Eso sí, la creadora del personaje que se caracteriza por hablar tartamudeando, dice que el público le ha hecho saber que se ríen desde que empieza y hasta que termina con sus presentaciones.

“Me siento feliz y satisfecha. (Estar de última en la tabla de posiciones) me parece lo más natural del mundo. Es así porque ellos (los demás participantes) son muy buenos, son muy versátiles, imitan, bailan y cantan precioso. Si hay alguien que tiene que ocupar el último lugar soy yo. Tendría que irle a alguien muy mal para que me gane en el último”, ríe.

Aunque Carmen no se “desvela” por ocupar los primeros puestos de calificaciones, dice que su compromiso con el trabajo es total. Ensaya y se esfuerza para hacerlo de la mejor manera. Aparte del acompañamiento que les dan en el programa, ella busca la colaboración de una amiga cantante.

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As bajo la manga

Carmen quiere continuar disfrutando de la experiencia del programa. No se afana por ser la mejor voz, pues sabe que algunos de sus compañeros llevan años de experiencia en el canto, pero sí quiere ganar una vez para apoyar una solidaria iniciativa.

Desde ya ha pensado en su estrategia para salir victoriosa. Hay un género al que le tiene fe para asegurar su éxito: el reguetón.

“Tal vez si imito un reguetón que no es cantado. Me sacan del canto y ahí podría dispararme un poquito. Tal vez en ese momento logre ganar, aunque luego vuela abajo. Con eso me sentiría ganadora. La parte de ayudar sí me desvela un poco; bien que mal quiero hacer llegar dinero a la fundación que quiero beneficiar. Se que vendrá (la oportunidad)”, dice

La fundación que quiere apoyar Carmen es Hospisonrisas, un grupo de payasitos que llevan alegría a niños hospitalizados. Ellos crearon los Hospisueños y con ayuda de otras personas logran cumplirle sus últimos anhelos a pequeños que están en fase terminal.

“Yo necesito hacer algo para darles la plata. Tienen tres sueños en fila”, contó la actriz.

Si lo imaginé, claro (tener las calificaciones más bajas). La primera conversación fue: yo no canto. Me van a pasar las de Gallina, las de Papi paz, las de Marcia y María, las de todo mundo. Pero ellos la pasaron bien, disfrutaron, ganaron. Mi objetivo es ganar una vez.