Cinco muertes violentas marcaron las celebraciones de este fin y principio de año en varias localidades del país.
Los fallecimientos se debieron a diversas causas, entre ellas un ahogo, un apuñalamiento, un atropello, un electrocutamiento y la manipulación de fuegos artificiales durante las fiestas de este lunes.
El primero de ellos fue un hombre de 50 años, de apellido Salas, que desapareció en el lago Arenal, cuando la lancha que conducía se volcó. Su cuerpo sin vida fue encontrado este martes, por socorristas.
El hecho sucedió en El Castillo de San Ramón, en la localidad de El Fósforo. Conocidos indicaron que Salas tenía experiencia como lanchero y conocía el sector, donde hacía viajes constantes con pescadores.
El ahogado era vecino de Nuevo Arenal, según informaron los cuerpos de socorro.
Ese mismo día, más al norte, en Los Chiles, un hombre de apellidos Díaz Rodríguez, de 25 años, murió atropellado por un vehículo marca Toyota.
El atropello ocurrió en la ruta 35, a las 9:50 p. m., en la comunidad de El Parque de Los Chiles, a 300 metros de la escuela local.
Díaz se topó el carro cuando intentó cruzar la calle sin fijarse, sufrió lesiones severas en su cabeza y falleció en el lugar.
Ya cerca de la medianoche del lunes, sucedieron otros dos hechos, uno en Guácimo y otro en Llano Grande.
En Nazaret de Guácimo, provincia de Limón, apuñalaron a un hombre de 51 años, poco después de las 11:30 p. m.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que la víctirma se encontraba viendo televisión en su casa, junto con su suegro.
El sujeto que lo apuñaló, entró a la sala y lo atacó por la espalda en el cuello; luego, escapó.
El apuñalado era peón agrícola y se encontraba en el sillón donde fue atacado, al momento de que llegara la Fuerza Pública.
Cuando la Cruz Roja de Guápiles llegó al lugar, luego de una hora de viaje, ya el agredido estaba sin vida.
A la misma hora, un joven de 21 años murió cuando le explotó un cuarto de dinamita, durante una fiesta familiar de fin de año, en Llano Grande de Cartago.
El accidente que tuvo Luis Miguel Fonseca Calderón, en Boquerón de Llano Grande, fue atendido por el comité de la Cruz Roja de la comunidad, a las 11:26 p. m. de este lunes, según confirmaron en las oficinas centrales de la CRC.
Aunque llegaron a la localidad atendiendo la llamada de emergencia, cuando los socorristas llegaron al lugar, Fonseca ya se encontraba sin vida.
Oficiales de la Fuerza Pública y agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) también se presentaron en el lugar de los hechos.
En tanto, en San Ramón de la Virgen de Sarapiquí, un hombre de 34 años perdió la vida luego de sufrir una fuerte descarga eléctrica, la mañana de este 1.º de enero.
La Fuerza Pública informó de que la víctima reparaba un microondas en su casa, cuando sufrió una descarga de unos 16 mil voltios, proveniente del aparato.
Cuando la Cruz Roja llegó al lugar, declaró sin vida al hombre.
Colaboraron: Edgar Chinchilla, Reiner Montero, Keyna Calderón