Los burpees son como las vacunas del ejercicio. De esas cosas que a pocos les gustan pero todos hacen porque son necesarias, buenas y saludables. La pequeña diferencia es que el pinchazo de una inyección tarda pocos segundos y los burpees, entre más tiempo tomen, mejor.
Desde hace algún tiempo este ejercicio es considerado, una de las estrellas del acondicionamiento físico y, según explica el entrenador personal Johan Parra, no es para menos ya que involucra el movimiento de grandes masas musculares y un gran consumo de oxígeno. Es decir, es una buena forma de quemar calorías sin necesidad de máquinas o espacio para hacer correr largas distancias.
VEA UNA RUTINA CON BURPEES: Cuatro minutos para quemar grasa: Nivel avanzado
Los burpees fueron concebidos en 1939 como un test de aptitud, por parte de Royal Huddleston Burpee. Para aplicarlo, se realizaban mediciones de frecuencia cardiaca en individuos no entrenados tras realizar solamente cuatro repeticiones. En su inicio se denominó Squat Thrust. En ese entonces consistía en cuatro pasos:
-Bajar a la posición de una sentadilla y colocar ambas manos en el suelo entre los pies.
-Saltar con pies hacia atrás en posición de plancha
-Saltar con pies hacia adelante para volver a la sentadilla.
-Volver a la posición de pie.
Según cuenta el entrenador Ariel Couceiro González en su página web, los primeros en cambiar su aplicación fueron los miembros de las fuerzas armadas de Estados Unidos. Ellos evaluaban a quienes se alistaban como soldados en la Segunda Guerra Mundial determinando cuantos burpees eran capaces de realizar en 20 segundos.
Para 1946 ya se le había incorporado una lagartija o push up luego de que los pies se colocaran en posición de plancha. Además, la prueba se aumento a un minuto. En ese entonces, Royal Huddleston Burpee se manifestó en contra de las variaciones hechas al movimiento que creó: las consideraba peligrosas si se realizaban por personas sin previo acondicionamiento físico o para aquellos con poca fuerza en la zona media (abdominal).
No obstante, su uso se ha popularizado aunque, tal y como apunta Parra, es importante que la persona tenga suficiente fuerza para realizar un push up y para realizar una plancha adecuada. En caso contrario, se puede realizar una variación llevando primero un pie al frente y luego el contrario, tal y como se observa en la imagen.