El karate pudo haber celebrado los Juegos Deportivos Nacionales el fin de semana anterior, pero el caos que sigue envolviendo a la Federación Costarricense de Karate (Fecoka) dejó a los atletas sin las justas, las cuales podrían reprogramarse el próximo año.
La ausencia de los libros legales por diez o más años, así como el decomiso de los contables por parte del Registro Nacional, mostraron desde hace meses parte de las irregularidades con las que ha venido trabajando esta agrupación, como explicó La Nación en un artículo publicado en julio anterior. Incluso, en noviembre el mismo Registro Nacional suspendió administrativamente a la Federación y a partir de ahí se desmoronaron los Juegos.
La Fecoka quedó paralizada, por lo que en ese estado no puede hacer sus funciones de manera normal, entre esas ser el proveedor del Instituto Costarricense del Deporte (Icoder) para esta actividad deportiva. Como sucede con las otras disciplinas, la Federación es la que brinda los servicios para que se realicen las competencias.
En esta ocasión el Icoder no podía contratar a la Fecoka al encontrarse suspendida, por lo tanto, debía buscar otro proveedor ajeno a esta, algo que sucederá hasta el próximo año, “porque los plazos de contratación son distintos” y ya no había tiempo, explicó Minor Monge, coordinador técnico de Juegos Nacionales, pese a que la resolución del Registro Nacional se dio en noviembre y hasta una semana antes se canceló el evento.
“Lo que teníamos como intención, como se ha hecho en todos los deportes, es contratar a la federación de representación nacional, que por sus condiciones tiene una capacidad de validar los resultados de todos los eventos nacionales e incorporarlos en un programa de acciones nacionales; buscábamos la posibilidad de que eso se solucionara; sin embargo no fue posible”, dijo Monge.
Incluso desde el 12 de diciembre la directora del Icoder, Alba Quesada, indicó, en respuesta a Miguel Zamora, vocal 2 de la Fecoka, que el Icoder no había formalizado contrato de servicios para la organización de las justas en la disciplina del karate, “esto por cuanto a la fecha la entidad cuenta con una anotación registral en la personería jurídica donde se indica que se encuentra inmovilizada”.
Aun así, el 30 de noviembre se publicó un documento oficial del Icoder en el que se daban los detalles del evento de karate para el fin de semana del 12 y 13 de diciembre, con participación de la Federación. Después se corrigió ese error, pues dicho ente está inhabilitado para oficiar cualquier evento oficial, como se mencionó antes, y el jueves 2 de diciembre, se hizo una Fe de Erratas y se eliminó el nombre de la Fecoka. Esa corrección no fue suficiente, afirma Roy Lee, encargado del karate en el Comité Cantonal de Alajuela (CODEA).
“Quitaron el nombre de la Fecoka, pero el problema es que el delegado que iban a contratar es José Luis Vargas, quien es director técnico de arbitraje y adicionalmente secretario de presidencia, y fue secretario de la federación en los periodos en que no hubo libros contables. Entonces se estaría contratando a una persona vinculada a la federación y estarían cometiendo un error administrativo”, mencionó Lee.
El nombre de Vargas aparece al final del documento corregido y al día siguiente de publicado, el viernes 3 de diciembre, se convocó al congresillo, para tomar una “decisión de forma colectiva”, pero no se dio el “resultado esperado”, explicó Monge.
En ese congresillo efectivamente se intentó ver la viabilidad de que se celebraran las justas y aunque varios representantes de comités manifestaron su disposición, finalmente no fue posible, como indicó luego Monge a este medio.