Sí usted está disputando los primeros lugares de su quiniela estos números le podrían servir para intentar acertar el marcador de los duelos entre Inglaterra-Bélgica y Croacia ante Francia

1. Marcadores frecuentes

El marcador que más se ha repetido en la Copa del Mundo es el 1–0, el cual se ha dado en 15 de los 62 partidos que se han tramitado, lo que representa el 24% de los compromisos.

El segundo marcador que se ha dado en más ocasiones es el 2-1, el cual se presentó en 14 juegos, lo que equivale a un 22,5%.

Si juntamos estos dos porcentajes con los únicos juegos que terminaron 3-2 y 4-3, tenemos que en un 50% de los partidos de Rusia 2018 el ganador logró el triunfo por apenas un gol de diferencia.

2. Croacia tiene gol

Croacia ha sido más anotador que Francia en lo que va del torneo, pues los croatas cuentan con 12 goles en Rusia 2018; mientras que los galos contabilizan solo 10.

La selección croata marcó al menos dos anotaciones en todos sus partidos, excepto en el duelo de los octavos de final ante Dinamarca, el cual empató 1–1.

Por su parte, Francia se quedó en cero ante la selección de Dinamarca y solo pudo marcar más de un gol ante Australia, Argentina y Uruguay.

3. No pinta a 0 a 0

Bélgica e Inglaterra son de los equipos más anotadores, pues tienen 14 y 12 goles respectivamente, por lo que el juego por el tercer lugar podría tener muchas anotaciones.

Los ingleses solamente no pudieron perforar el marco de Thibaut Courtois en la fase de grupos ante Bélgica, por lo que tendrán una nueva oportunidad este sábado a las 9 a. m.

Bélgica tiene un promedio de gol superior a dos por encuentro y solo no pudo anotar en la semifinal del pasado martes ante Francia.

4. Tercer lugar abierto

Históricamente el juego por el tercer lugar tiene un promedio de gol más elevado que las finales en la Copa del Mundo, esto puede obedecer a que los dos equipos tienen menos cosas en juego y se dan más libertades.

En los 20 mundiales anteriores, se han efectuado 18 partidos por el tercer lugar, pues en Uruguay 1930 y Brasil 1950 este juego no se realizó.

En esos 18 duelos se marcaron 71 goles, para un promedio de gol de cuatro anotaciones por partido, otro dato para pensar en que entre ingleses y belgas podrían caer muchos goles.

5. Finales cada vez más austeras

Las finales han sido un poco más cerradas que los duelos por el tercer lugar, pues en las 19 que se han jugado se han registrado 68 goles, para un promedio de 3,5.

Hablamos de 19 finales pues en Brasil 1950, el famoso Maracanazo en el que Uruguay derrota a Brasil no era una final como tal, coincidió en ser el último partido de un grupo en el que estaban también España y Suecia.

Pese a que el promedio histórico es de 3,5 goles por final del mundo, desde 1986 no se marcan más de tres goles, cuando Argentina venció 3-2 a Alemania en la coronación de Diego Armando Maradona.

Además, las últimas dos han tenido solo un gol y dos de las seis más recientes se definieron desde el punto de penal.

6. ¿Por qué no tres goles?

Los últimos cuatro ganadores del partido por el tercer lugar anotaron tres goles en dicho juego, otro indicio de que podrían caer muchas concreciones.

Holanda le propinó un 3-0 a Brasil en el 2014, Alemania venció 3-2 a Uruguay en Sudáfrica 2010 y 3-1 a Portugal en el 2006; sumado al triunfo 3-2 de Turquía frente a Corea del Sur en 2002.

La diferencia más grande en estos partidos se dio en Estados Unidos 1994, cuando Suecia le propinó un 4-0 a la representación de Bulgaria.

Únicamente en las definiciones de Chile 62, México 70 y Alemania 74 el marcador por el tercer lugar terminó 1-0, por lo que apostarle a este número no parece muy correcto.

Hay quinielas en las que se permite apostar por el empate, pero esto implica que el duelo por el tercer lugar se vaya a penales, algo que nunca ha sucedido en la historia de los mundiales.

7. Delanteros muy amarrados

Hay quinielas que dan puntos extra en el caso de que usted acierte el anotador del primer gol del partido. Si usted está pensando en un delantero podría cometer un error. Las estrellas y especialmente los atacantes, suelen estar muy vigilados; no extraña entonces que ante tanto recelo, aparezcan otros protagonistas.

Si tomamos las finales desde 1990 a la fecha, solamente Ronaldo logró anotar en la disputa por el cetro de Corea y Japón 2002.

Los otros ocho goles desde la final de Italia 90 fueron maracados por seis por mediocampistas (tres de Zinedine Zidane, uno de Andrés Iniesta, uno de Mario Gotze y uno de Emmanuel Petit) y dos por defensores: Marco Materazzi y Andreas Breheme.

Estos números cambian si nos enfocamos al partido por el tercer lugar, pues los volantes contabilizan 13 anotaciones, los delanteros 11, solo marcó un defensa y se registró un autogol.

Así que antes de pensar en Mandzukic o Giroud analice a Modric o Pogba.