Etiquetas utopía


Lo envidiable del ejercicio propuesto por Sami Mahroum es que, de la misma manera que Moro se puso a armar una construcción creativa, se atreve a pensar en el futuro.


Después de siglos de industrialismo, estamos en la cúspide de una revolución tecnológica que tiene el potencial de abolir el trabajo y dar lugar a sociedades construidas en torno al ocio.