Persisten vientos de incertidumbre. No está claro que podría ocurrir con las tasas de interés en colones y dólares en el segundo semestre. El desenlace del proyecto de eurobonos arrojará un poco de luz para el contexto costarricense, pero esta historia todavía se está escribiendo en la Asamblea Legislativa. Mientras tanto, en Estados Unidos, la información que procesa la Reserva Federal para afinar su política monetaria es algo confusa: mercado laboral fuerte, economía dubitativa e inflación muy baja.
La respuesta del inversionista conservador, en estas circunstancias, es buscar mayor seguridad, y eso significa inclinarse hacia opciones de ahorro más líquidas aunque ello implique sacrificar rendimiento. A la cabeza del menú aparecen los certificados de depósito a plazo, aunque en un reciente informe que compartió la Cámara de Fondos de Inversión (CAFI), con datos al primer trimestre de este año, llama la atención el fuerte crecimiento (17%, de diciembre a marzo) de los fondos de mercado de dinero, diseñados para invertir a corto plazo.
Los fondos líquidos o de mercado de dinero se convirtieron (para bien o mal), en uno de los dos pilares sobre los cuales se sostiene la industria de carteras mancomunadas. En ellos se administra el equivalente a $2.385 millones (casi el doble de lo que costaría el tren eléctrico de la Gran Área Metropolitana), con una participación 50-50, entre colones y dólares, y casi 100.000 cuentas reportadas, entre inversionistas físicos y jurídicos.
Utilizar certificados a plazo es entrenar en la piscina. Los fondos de inversión líquidos es animarse a nadar los primeros 1.500 metros en aguas abiertas (cerca de la orilla, eso sí). Se puede abrir una cuenta con un monto pequeño, desde ¢10.000 en algunos casos, y hacer aportes adicionales de ¢1.000.
Debido a la política de “conozca a su cliente” la sociedad administradora de fondos de inversión (SAFI) le solicitará tanta información como si usted tuviera la fortuna de Jeff Bezos, director ejecutivo de Amazon, pero una vez superado este trance recibirá amplios reportes periódicos con información económica y financiera valiosa, y los ejecutivos de la SAFI estarán en la obligación de atender todas sus dudas respecto al producto, de forma tal que usted, en poco tiempo, dominará la letra general de esta opción de inversión.
La popularidad de los fondos de mercado de dinero (además de nuestra fobia al largo plazo), se debe a que permiten una permanencia corta (en varios casos de tres días) y disponibilidad casi inmediata del efectivo cuando lo requiera; en cuestión de un día hábil después de solicitar los recursos y como máximo tres, los recursos estarán en su cuenta. Existen situaciones especiales donde este plazo de redención podría extenderse, por ejemplo, en caso de una corrida de inversionistas, situación hipotética de la cual tampoco están exentos los bancos.
Otra característica de los fondos de mercado de dinero es que ofrecen rendimientos más estables que un fondo de inversión de crecimiento, por citar un ejemplo, y la probabilidad de sufrir pérdidas es baja. Están hechos para personas con baja tolerancia al riesgo y moderado conocimiento del mercado bursátil. Sin embargo, hay riesgo asociados: por movimientos en tasas de interés, variación en el tipo de cambio, altas inflaciones, y de liquidez, si hubiera algún problema para vender los valores propiedad del fondo.
Uno de los fondos en colones más grandes por volumen de activos está a cargo de Popular SAFI, se llama Popular Mercado de Dinero Colones, y el dato que tengo a mano (15 de abril pasado), es que su rendimiento para los últimos 30 días fue de 5,18%, anualizado. Una de las máximas de los fondos es que su desempeño pasado no garantiza rendimientos en el futuro; la otra es no comparar los rendimientos con las tasas de los certificados de inversión, pero aquí no hago mucho caso, los puntos de referencias son necesarios para decidirse a hacer una inversión más riesgosa: si el 15 marzo hubiera invertido en un depósito electrónico del Banco Central, a 30 días, el 15 de abril habría obtenido un retorno neto de 5,15% anualizado.
Además de buscar un mejor rendimiento, hay otras muchas razones para elegir un fondo de mercado de dinero: ampliar horizontes financieros, mantener una parte del efectivo menos a la mano, para mitigar fraudes electrónicos o salvarlo de la tentación de gastar más, o tener los recursos disponibles a la espera de una mejor opción.