La imagen de San José Obrero que acompañará a los fieles mañana sábado durante el festejo del Día de San José, tiene 297 años de antiguedad y es considerada una de las obras de arte más antiguas y valiosas del país.
La escultura fue tallada por el artista guatemalteco Manuel de Chaves en 1714, y llegó al país a mediados del siglo XVIII.
“No hay muchos datos históricos acerca de la imagen, pero sí sabemos que fue una imagen traída especialmente para festejar a San José como patrono de Costa Rica. Tiene la bandera de nuestro país. Es una imagen muy valiosa; la azucena que lleva es hecha con plata y oro”, comentó ayer a La Nación Mario Segura, vocero de la Curia Metropolitana.
Las vestimentas de este santo no tienen la antiguedad de la escultura, pero muchas partes de su indumentaria datan del siglo XIX y tienen un alto valor histórico.
Cuidados especiales. Por tratarse de una imagen tan valiosa, esta solo se exhibe durante la festividad de San José. El resto del año se mantiene bajo custodia en la catedral metropolitana.
“Queremos cuidar la imagen al máximo y preservarla, y si la sacamos y la exponemos mucho, eso la va deteriorando. También cuidamos las vestimentas que utiliza el santo para que no se deterioren; se guardan durante el año para que no les dé el sol. La fiesta de San José es la mejor oportunidad para sacar la imagen a los fieles y que acompañe la celebración patronal”, dijo Segura.
El festejo del Día de San José se llevará a cabo este sábado 19 de marzo a las 11 a. m. en la catedral metropolitana. La eucaristía será oficiada por el arzobispo de San José, monseñor Hugo Barrantes.
Desde ayer por la mañana, los funcionarios de la catedral iniciaron preparativos como acomodar las vestimentas de la imagen y comenzar la decoración del templo para la ocasión.