Lo confieso: soy una persona que no sabe cómo lidiar con las despedidas. Cuando busco los motivos que me han llevado a ello, pienso en que, quizá, he tenido demasiadas en mi vida, más de las que hubiese querido.
Hay quienes tienen como filosofía que, cada cierto tiempo, tenemos que dejar soltar para recibir diferente. Sin embargo, qué complicado me resulta hacerlo cuando se trata de personas, gestos, momentos o pertenencias que me resultan muy valiosas.
En algún momento llegué a pensar que, a medida de que eran más frecuentes, más me acostumbraría a ellas. No, no resultó como esperaba.
A pesar de ello, hay ciertos tipos de “adiós” que, con todo el dolor que causan, valen agradecer. No sé por qué, pero creo son los que se convierten en el inicio de algo realmente prometedor.
Eso es lo que siento con la llegada de la octava temporada de The Vampire Diaries , este domingo 4 de diciembre , a las 6 p. m., al canal MTV. Podría sonar algo exagerado, pero hay una parte de mí a la que le cuesta la idea de despedirse de los hermanos Salvatore.
Confieso, además, que las historias de vampiros no son mi estilo, pero la existencia de esta serie, que llega a su inevitable final con esta entrega, me permitió redescubrir algo que había olvidado: lo maravilloso que es contar con una persona que, contra todo pronóstico, siempre está allí y no pierde la esperanza que depositó en uno.
Y esto lo pude vivir gracias a la insistencia de mi mamá, que no teme en dudar ni un segundo la invitación de acostarnos todo un día a ver los capítulos de sus series favoritas y esta, sin lugar a dudas, es una de ellas.
Al enterarnos de que esta sería la temporada final del show , a ambas nos invadió la nostalgia, pues si algo nos han enseñado los hermanos Stefan y Damon Salvatore es que, más allá de los errores y las malas decisiones, la vida siempre nos da la oportunidad de redimirnos.
Decirle adiós a The Vampire Diaries no será fácil, pero bien valdrá el esfuerzo. Es lo mínimo que podría hacer por cada uno de esos seres de otro mundo, y con los de este, que tengo la dicha de toparme a diario.
Véalo. Domingo 4. MTV. 6:00 P.M.