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Angelina Jolie y Matt Damonen el filme El buen pastor , cuando una familia resulta arrasada por las peripecias crueles del mundo de los espías, especie de selva tan humana como zoológica: la ley del más fuerte en lo brutal. Romaly p/la nación.
La publicidad para la película El buen pastor (2006, The Good Shepherd ) afirma que “es la mejor película de espionaje jamás hecha”. Como ven, es una frase retadora. Lo que queda por saber es si es cierta. Esto solo lo podremos averiguar en el cine y en el largo metraje de esta cinta dirigida por Robert de Niro.
Central de Inteligencia. Con esa introducción que hace la propaganda, tenemos que darnos por enterados de que, al paso, este filme es una especie de historia nunca contada, con algo de “había una vez” y con mucho de “así es”.
En otras palabras: tiene que ver con la tenebrosa (según sea vista) Central Intelligency Agency (CIA), o sea, la Central de Inteligencia de los Estados Unidos.
Secretismo al por mayor. El personaje principal de esta película es Edward Wilson (encarnado por Matt Damon), sujeto formado en la importancia de mantener secretos (el secretismo), quien desde joven camina por sociedades secretas, por lo que la discreción se convierte en norma de su conducta.
Wilson tiene una infancia privilegiada, pero igualmente en desgracia (trágica desde el suicidio de su padre). En 1939 se une a los Skull and Bones ( Calavera y Huesos ).
Por eso es que este personaje se convierte en candidato perfecto para ser agente secreto y comienza a trabajar para Office of Strategic Services (OSS, Oficina de Servicios Estratégicos), entidad precursora de la CIA. Así cumple durante la Segunda Guerra Mundial.
Vida y mundo. La vida de Edward Wilson se moverá, de aquí en adelante, según los vaivenes de la geopolítica mundial y con el accionar de la agencia de espionaje más poderosa del mundo.
En la CIA nada es lo que parece y nada se parece a lo que es. Es el mundo de las fidelidades traicionades, de las muertes solo por sospechas, de la frialdad como ejecutora de cualquier acción. La CIA tiene su momento expresivo en la abultada paranoia de la llamada Guerra Fría.
En estos momentos, los métodos de la CIA se convierten en métodos normales dentro del espionaje. Nada de esto sucede sin secuelas. La vida familiar de Edward Wilson se viene a pique, poco a poco, como un barco que naufraga en el silencio de los secretos del hombre de la pareja. Su esposa llega al punto de no aguantarlo; ella se llama Margaret, pero todos la apodan Clover (encarnada por la actriz Angelina Jolie). Tienen un hijo, quien se convertirá en personaje importante en la trama de este filme.
El buen pastor tiene a su haber un elenco prestigioso, además de los ya citados, actúan: Alec Baldwin, Tammy Blanchard, Billy Crudup, el propio Robert de Niro, John Turturro, William Hurt, Michael Gambon, Keir Dullea, Timothy Hutton y Joe Pesci.
Sin misericordia. Lo que se muestra con esta película es la poca misericordia y el poco humanismo que hay en este mundo del espionaje; solo importa el fin, lo que hay que conseguir políticamente, aunque haya que pasar por encima de quien haya que pasar, a ojos cerrados. wvenegas@nacion.com
