Si usted alguna vez vio el reality show de subastas ¿Quién da más? , de seguro recordará a Barry Weis, uno de los más carismáticos y excéntricos compradores. Pero ¿qué hizo este coleccionista con todas las antigüedades que sacó al azar de los contenedores?, y ¿dónde compra desde que se despidió del programa?
La nueva serie de A&E, Los tesoros de Barry , tiene las respuestas.
Para Barry, comprar es un hobby , pero uno en el cual es un experto. Según su perfil en el sitio web del canal, su gama de conocimiento se extiende desde autos clásicos hasta reliquias de guerra, y todo lo que se encuentre en el medio.
En ¿Quién da más? se valía de extrañas técnicas para determinar si había algo valioso en los contenedores, como ponerse lentes de vista nocturna llegar a las subastas acompañado de psíquicos. Fue así como logró convertirse en el más ingenioso y popular personaje del programa, y quien hizo de las compras de almacenamientos un verdadero acontecimiento personal.
Su pasión por los objetos antiguos nació cuando tenía 15 años y ahora, con 63 y ya retirado del negocio de las bodegas, tendrá su propio programa.
A través de ocho episodios, el Coleccionista (como se hizo llamar en la anterior serie) hará gala de sus dotes para el regateo de objetos con cualidades únicas, antigüedades con precios exorbitantes y todas aquellas rarezas que no podrían faltar entre la colección de un excéntrico como él, pues ciertamente no son objetos que cualquiera se complacería en colocar en media sala de su casa.
En cada capítulo, Barry viajará por Estados Unidos con esta única consigna y llevará consigo a algún familiar o un miembro de su extraño y restringido círculo de amigos. En uno de los episodios, por ejemplo, Weiss maneja hasta Austin, Texas, para dar con un artículo de gusto exquisito. Esta vez, se niega a revelar el nombre del misterioso cliente coleccionista, lo que al final deriva en una sorpresa para los televidentes.
Otro de los momentos cumbre llegará en el penúltimo capítulo, cuando Barry visitará a su amigo Gino, un coleccionista de juguetes. Sin embargo, el gran protagonista no será ninguno de ellos dos, sino un alucinante auto que el cine conoció en 1989. ¿Quieren una pista? El director de la película en la que sus neumáticos rodaron por primera vez fue Tim Burton.
Así, a lo largo de Los tesoros de Barry , el aventurero conocerá nuevos amigos e imprimirá su sentido del humor en cada búsqueda. Después de todo, un buen momento no tiene precio.