Dreamworld, a pesar de ser una ciudad ficticia, no tiene nada que envidiarle al mundo real: es un reino medieval venido a menos, en el que un padre busca que su hija se case en un matrimonio por conveniencia, mientras ella lucha por acabar con todos los estereotipos que le son impuestos por su apellido.
Para la princesa Tiabeanie –mejor conocida como Bean– sus prioridades están más que definidas. A sus 19 años busca vivir en juegos de peligrosas apuestas, beberse hasta el agua de los flores y salir a recorrer el mundo fuera de las paredes de su aburrido castillo.
Como para todo roto siempre hay un descocido, la joven no estará sola en sus aventuras, ya que la acompañarán Elfo, un adicto a los dulces y al optimismo, y Luci, su pequeño demonio personal con el que fue “maldecida” desde adolescente.
Esta es la trama de (Des)encanto la nueva serie animada de adultos de Netflix, cuyos 10 episodios de la primera temporada se estrenan este viernes 17 de agosto en todo el mundo.
Bajo la mente maestra de Matt Groening, creador de Los Simpson, este sitcom busca rendirle homenaje, de una forma bastante satírica, a los ya casi extintos cuentos de hadas.
“Comencé a pensar en la serie hace más de diez años, tomando notas sobre el tipo de cosas que aparecen en los cuentos de hadas y cuáles podríamos incorporar a nuestra serie. Una de las cosas que me preocupaban era que la serie fuese puro escapismo, que no hubiese nada real y fuese muy tonta”, declaró Groening en la pasada edición del Comic Con San Diego.
Libertad.
Y es que fiel a su estilo, el creador aceptó la propuesta de unirse a Netflix con la única condición de no recibir ningún tipo de censura en los distintos ejes de la historia o en los personajes, ya que para él ese es parte del éxito.
“Una de las grandes ventajas de trabajar con Netflix es que derriba la estructura de las sitcoms tradicionales por la que debes resetear la historia al final de cada episodio para que puedas ver la serie en cualquier orden. El nuevo modelo de consumo nos permite crear arcos narrativos mucho más amplios”, expresó en ese momento.
El permitirse este lujo es el resultado que verá en pantalla el público, con una “antiheroína” es una princesa borracha que quiere salir del castillo de su déspota padre, su demonio personal y un elfo fugado de un mundo irritantemente feliz.
Tras escapar del matrimonio arreglado que tenía en puertas, Bean y sus inseparables secuaces cumplen su sueño de explorar tierras desconocidas.
Gnomos, duendes, diablillos, sirenas, monstruos de pantano y otras especies serán parte de un camino lleno de lecciones sinceras y una vida que se caracterizará por todo, menos por la falta de “encanto”.
“Esta no es la típica historia animada, en donde todo vuelve a comenzar en cada episodio. Al contrario, cada capítulo se sostiene por sí solo y juntos cuentan la historia épica de Bean, sus amigos y su familia”, afirmó Groening en una nota de prensa distribuida por Netflix.
En (Des)encanto el productor trabaja junto a Abbi Jacobson (Broad City, BoJack Horseman) y quien le da voz a Bean; Nat Faxon (Friends from College, Married) como Elfo y Eric Andre (The Eric Andre Show, Man Seeking Woman ) es Luci.
Para cada uno de ellos, interpretar estos personajes que son todo lo opuesto a lo que se conoce como “perfectos” es lo que hace de este trabajo uno de los más especiales en sus carreras.
“Bean es una princesa tan atípica que eso es lo que la hace genial. Muchas mujeres deberían atreverse a ser más como ella, salirse de lo común”, asegura Jacobson.
Y es que esa parece ser la regla y no la excepción con (Des)encanto: dejar de lado los prejuicios y simplemente atreverse a vivir feliz.