Un álbum clásico del rock progresivo apaga sus 40 velitas

Por donde se vea, The Dark Side Of The Moon es un álbum que sigue haciendo historia. No solo permaneció durante 800 semanas consecutivas (15 años) en las listas de la revista Billboard , también influyó –y lo sigue haciendo– entre los fans de la banda Pink Floyd a lo largo de varias décadas.

Hoy es particularmente especial para los seguidores del grupo y del disco, porque se conmemoran 40 años del lanzamiento al mercado en Inglaterra.

Por eso, la propia agrupación motiva a sus fanáticos para que participen de un día de escucha de este lado oscuro de la luna (nombre en castellano del elepé). Para eso habilitaron la posibilidad de disfrutarlo desde el sitio www.darkside40.pinkfloyd.com .

También la banda motiva a que conforme escuchen el larga duración, según la revista Rolling Stone , escriban tuits usando la etiqueta #DarkSide40, con recuerdos y emociones que les produzca esta escucha masiva.

Estela. Pink Floyd es de esos grupos de culto que muchos siguen fielmente. Instrumentistas y melómanos en Costa Rica no escapa de la seducción de la música que hicieron leyendas, como Roger Waters y David Gilmour.

¿Qué hace a este álbum tan especial? (dejando de lado que vendió poco más de 50 millones de copias hasta la fecha). Ari Lotringer, guitarrista de Time´s Forgotten , considera que definió verdaderamente lo que era un disco conceptual, al punto de sentir que existe una historia, un viaje.

La innovación también marcó a The Dark Side Of The Moon . Contó con Alan Parsons como ingeniero de grabación dentro de las paredes del memorable Abbey Road Studios, en Londres.

Paul Rubinstein , ingeniero de sonido en Real Music Productions y egresado de Berklee College of Music, explicó que Parsons se permitió experimentar y crear sonidos, usar técnicas no convencionales para lograr esa visión del artista. Todo eso hizo que ganara un premio Grammy por el álbum como mejor ingeniería de sonido.

“Es un disco de admirar por músicos e ingenieros. Los solos de David Gilmour (guitarrista) tienden a ser icónicos”, agregó Rubinstein.

Un buen ejemplo de esa experimentación del álbum son los sonidos de monedas, cajas registradoras y otros efectos que crearon para el tema Money .

El trabajo de Gilmour con las guitarras en este disco no deja de admirar a los expertos. Lotringer añadió que el riff de Money es “épico”, basta escucharlo un momento para tenerlo en la cabeza por largas horas.

Aaron Retana, guitarrista de estudio y profesor, cree que el sonido de las guitarras, tanto en los solos como acompañando, es excepcional. Por eso Money y Time tienen ese sonido que todo guitarrista desea imitar.

El disco tenía muchos elementos para trascender, así lo considera el crítico y programador de música Alberto Zúñiga.

“La ingeniería de sonido superó mucho a las producciones hechas hasta ese momento. Además, la destreza de cada músico nos logró seducir”, explicó Zúñiga.