Hace un par de meses, “loca” era el adjetivo usado para describir la idea de Radio Nacional de volcar toda su programación a mú-sica costarricense. Hoy, los adjetivos permanecen intactos en algunos sectores de la población, pero la idea ya no es idea: es realidad.
Desde la medianoche de este miércoles, la frecuencia ubicada en el 101.5 FM dedicará sus espacios de programación regular a la música costarricense de cualquier época, estilo y color. Trátese de artistas extranjeros que residen en el país o ticos que trabajan dentro de otras fronteras, en Nacional hay campo para todos.
La emisora –uno de los medios del Sistema Nacional de Radio y Televisión, mejor conocido como Sinart– se convierte, así, en el primer canal de radio que dedica toda su parrilla musical a una vasta fonoteca de obras costarricenses, las cuales –según datos de Asociación de Compositores y Autores Musicales de Costa Rica (ACAM)– por lo general representan solo 3% de la programación total de los medios locales.
“Eso significa que tres de cada 100 canciones que suenan en radio en Costa Rica son nacionales. Es casi como no poner ninguna”, dijo Randall Vega, director de Radio Nacional e impulsor del proyecto que hoy ve la luz. “La nuestra es una apuesta muy loca, pero creemos que es lo necesario”.
“Yo traje el proyecto de la música nacional a la radio”, afirmó Vega, quien labora para el Sinart desde hace siete meses, lapso en el que ha dedicado todos sus esfuerzos a lograr que esta noticia exista. Hoy, músicos de todo el país celebran que sus canciones puedan rotar en un proyecto como este.
“Hay un objetivo político-institucional que tiene que ver con los criterios con los cuales se conceptualiza una radio de servicio público, que es un medio de comunicación que debe servir para fomentar la identidad nacional, y nosotros creemos que si hay elemento que uno puede vincular entre la identidad nacional y la radio es la música”, agregó Vega.
En sus palabras, Costa Rica tiene una “boyante industria musical” que no tiene difusión, pues no existe legislación que urja a los medios a programar determinada cantidad de producción nacional. De ahí que suene tan poca música local en radio. “A nosotros eso nos parece gravísimo, porque no solo no nos estamos escuchando a nosotros mismos ni conociendo nuestras sonoridades e historias, sino que tampoco estamos aportando a una industria que podría crecer muchísimo”.
Radio Nacional, al ser un medio estatal y no comercial, tiene la oportunidad de demostrar –o no– que la música local es suficiente, no para un porcentaje de programación, sino para toda la programación. La esperanza de Vega es que los próximos directivos de la emisora tengan el objetivo de continuar con el proyecto; que siga.
Pasos. Unas 5.000 canciones forman parte de la nueva parrilla musical de Nacional, con autoría de unos 1.200 artistas. Esta es una primera selección que se escogió de entre más de 23.000 canciones a disposición, pero el trabajo de armar una programación musical nunca se detiene; es perenne.
Randall Zúñiga, programador del medio, analizó casi 150GB de música para dar con esta primera lista, que tiene de todo tipo de ritmos para distintas franjas. La música llegó luego de un convenio con ACAM y AIE (Asociación de Intérpretes y Ejecutantes) y del anuncio público de recibimiento de obras que la radio realizó en junio, pero los artistas pueden seguir enviando su música.
Entre la fonoteca se encuentran unos 500 boleros, 300 baladas y 150 calipsos, género autóctono que prácticamente no tiene cabida en los medios locales. Cumbia, punk, ska, rock progresivo y reguetón son otros de los géneros presentes, propios de un país que es un puente de inmigraciones y que respira gracias a la multiplicidad cultural. Por eso mismo, no se desestiman obras en otros idiomas ni ritmos no autóctonos.
Además, entrarán a partir de esta semana ocho nuevos programas a la parrilla, cada uno enfocado en una expresión musical o artística. Por ejemplo, Perra Pop (producido por Rodolfo Fo León), presentará entrevistas a músicos consolidados y jóvenes, y pondrá a sonar pura música actual.
El escritor Warren Ulloa tendrá el programa Literofilia, sobre literatura; De celuloide y acetato explorará la relación entre música, televisión y cine; Pioneros repasará leyendas de la música local; Directo al cráneo será dedicado al rock y al metal; Los artistas de Tiquicia pondrá pura música popular y Latido América, programa también transmitido por Radio U 101.9 FM, analiza a la música y a la cultura como ejes vitales de la identidad latina.
Las revistas actuales de la emisora se mantendrán a flote, y habrá franjas durante todo el día dedicadas a géneros específicos. Además, en el futuro entrarán otros programas de músicos como la rapera Nakury y el cantante de El Guato, Geovanny Durán.
A la vez, durante su actividad de presentación a la prensa, ayer, se firmó un convenio con ACAM, AIE y los artistas para asegurar que cada obra que suene sea remunerada para efectos de derechos de autor. “La labor remunerada del músico es vital”, dijo Zúñiga, “No es una carga o un peso, sino más bien un pago básico, digno, necesario, más que urgente”.
El programador de Nacional se hizo una gran pregunta ayer: “¿Qué habría pasado en el 2015, qué sería de la cultura costarricense, de la identidad nacional, si una apuesta de este tipo se hubiera hecho hace 30 años? Ahora nos tocó a nosotros, y creo que vamos a evidenciar que sí se puede hacer esto y mostrarle a la gente todo lo que nos estamos perdiendo por no tener más espacios para la música nacional en radio”.