Amy Winehouse ** REMOVES ONE OF THE BYLINE CREDITS FILE ** British singer Amy Winehouse poses for photographs after being interviewed by the Associated Press at a studio in north London, in this Friday Feb. 16, 2007. British singer-songwriter Amy Winehouse was arrested in Norway for drug possession and held in custody overnight, a police official said Friday Oct. 19, 2007. Winehouse, her husband Blake Fielder-Civil and a third person were released at around 7 a.m. (0500 GMT) Friday after paying euro500 (US$715) in fines, Prosecutor Lars Morten Lothe said. (AP Photo/Matt Dunham) (MATT DUNHAM)
Hace, exactamente, un año, el 23 de julio quedó marcado. Fue el día en que murió Amy Winehouse, la Diva Soul , tan famosa y escuchada como polémica y autodestructiva. Y aquel hecho copó los noticieros, las redes sociales y puso en luto a millones de personas.
A un año de haber sido encontrada muerta, a los 27 años, en su apartamento del barrio londinense de Camden Town, ella ha protagonizado una larga lista de hechos. Tras 12 meses, la chica de voz profunda sigue presente.
Es cierto, Amy partió pero en su ausencia se encadenaron hechos alrededor de su deceso, de las razones del mismo; de su obra –los dos discos que había publicado y el álbum que tenía en proceso, más un lote generoso de temas sueltos–, y de su devoradora, alcohólica y drogadicta forma de vida.
Presente. Reportes de agencias de prensa aseguran que sus canciones suenan y su estética e imagen están presentes en las calles y en casi cada local de Camden Town, barrio donde vivía en Londres.
Por ejemplo, en el pub The Hawley Arms, uno de los más frecuentados por la artista, canciones como You Know I'm Not Good o Back To Black forman parte de la banda sonora habitual de ese bar. Y sus paredes están decoradas con algunas imágenes de la cantante y uno de los estantes detrás de la barra está dedicado a su memoria, describió AP.
“Los brazos tatuados, las frondosas cabelleras recogidas en un moño, los ojos pintados, los grandes pendientes dorados o los estampados de cuadros son notas habituales de este barrio del norte de Londres”, describió AP.
Los medios informativos también han dicho que, frente a su antigua casa, siguen apareciendo a diario velas, cartas de recuerdos y flores como las que hace un año invadieron el lugar.
Ella, en ausencia, se ha convertido en hija querida de Camden Town. En estas dos últimas semanas, coincidiendo con el primer aniversario de su muerte, la estación de metro de Camden Town ha lucido un afiche con el retrato de Winehouse que elaboró el artista británico Johan Andersson.
También fue anunciado donde alzarán una estatua de bronce de Amy Winehouse en The Roundhouse, donde ella salió por última vez a escena pocos días antes de su muerte.
Ojo y oído. Acercándose también a la fecha del primer aniversario, el padre de la cantante, Mitch Winehouse, publicó el 26 de junio Amy, My Daughter . El libro contiene las memorias del padre de la chica de Rehab , en el que asegura que fue Blake Fielder-Civil, exesposo de la cantante, quien la llevó al alcoholismo y la drogadicción.
La vida dolorosa y decadente que tuvo la cantante llevó a su padre a crear la Fundación Amy Winehouse, destinada a ayudar a jóvenes artistas carentes de medios económicos y a gente con adicciones graves.
La voz de la Diva Soul siguió dando frutos en ausencia. A pocas horas de fallecida, su segundo álbum, el Back To Black (2006), se disparó en ventas, a tal punto que para el día siguiente de su deceso había llegado al puesto 59 de los 100 álbumes más vendidos en el Reino Unido . Para el 27 de julio del 2011, ya estaba de número nueve en Billboard .
En setiembre publicaron como un sencillo una versión de Body And Soul , fino dúo póstumo de Amy con Tony Bennett.
En noviembre también apareció Like Smoke , dúo de Amy Winehouse con Nas y, poco tiempo después, lanzan en Internet el video de otro nuevo sencillo, Our Day Will Come .
Y el 5 de diciembre llegó otro golpe fuerte: Island edita el álbum póstumo Lioness: Hidden Treasures , recopilación de restos de sesión y maquetas del álbum que Amy hacía antes de fallecer.
Un día después de publicado, el que quedó como el tercer disco de estudio de Amy, la colocó en el número uno de las listas de ventas del Reino Unido al vender, en pocas horas, 140.000 ejemplares.