El primer ministro británico, Boris Johnson se casó con su prometida Carrie Symonds en una pequeña boda que fue planeada en secreto.
A través de un vocero Downing Street confirmó este domingo que el primer ministro británico y Carrie Symonds se casaron la tarde del sábado 29 de mayo en la catedral de Westminster, en el centro de Londres.
Los diarios Mail on Sunday y The Sun afirmaron el sábado que Johnson, de 56 años y conocido por su agitada vida amorosa, acababa de casarse con Symonds, de 33, en la catedral católica en presencia de amigos y familiares.
"El primer ministro y la señora Symonds se casaron ayer por la tarde durante una pequeña ceremonia en la catedral de Westminster", dijo un portavoz de Downing Street, agregando que la pareja lo celebrará "con su familia y amigos el próximo verano".
Johnson es el segundo primer ministro británico que se casa durante su mandato. El primero fue Robert Jenkinson en 1822. Cuando fue elegido, en 2019, se convirtió en el primer jefe de gobierno en vivir en el número 10 de Downing Street (la residencia oficial y oficina del primer ministro) sin estar casado con su compañera.
Carrie Symonds se convirtió en la pareja más joven de un primer ministro británico en 173 años, informó la BBC.
Ella es hija de uno de los fundadores del periódico de centro izquierda The Independent, Matthew Symonds, y de la abogada del diario, Josephine McAffee, agregó el medio británico.
Creció en el suroeste de Londres antes de estudiar Historia del Arte y Teatro en la Universidad de Warwick y se unió al equipo de prensa del Partido Conservador en 2010.
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Fin a la espera
La pareja llevaba meses esperando para casarse, pues tuvieron que postergar su boda, programada para el año pasado, a causa de la pandemia. Se comprometieron en diciembre de 2019 y tienen un niño de un año, Wilfred. El hijo de Symonds y Johnson nació semanas después de que el primer ministro abandonara la unidad de cuidados intensivos, adonde fue ingresado tras haber contraído el coronavirus.
A la ceremonia asistieron una treintena de personas --el máximo actualmente autorizado--, tras haber sido invitados en el último minuto, según Mail on Sunday.
"Mi enhorabuena al primer ministro y a Carrie Symonds por su unión", dijo el domingo en Sky News Nadhim Zahawi, el secretario de Estado para la campaña de vacunación, que no acudió a la ceremonia.
La boda estuvo oficiada por el mismo cura que bautizó al hijo de la pareja --que también estuvo presente--, informó The Sun.
Boris Johnson ya se había casado dos veces. Tuvo cuatro hijos con su esposa anterior, la abogada Marina Wheeler, de la que se separó en 2018. Además, tendría otra hija nacida de una aventura amorosa.
Un dato interesante es que si bien Johnson ha llegado al altar dos veces antes, “la Iglesia Católica Romana permite que los divorciados se vuelvan a casar si los matrimonios anteriores fueron fuera de la institución religiosa”, indicó la BBC.
The Sun informó que el día de la boda el personal de seguridad solicitó a los transeúntes que permanecían en las cercanías de la catedral de Westminster que se retiraran del lugar a eso de la 1:30 p. m., hora local. Unos treinta minutos después habría llegado, vestida de blanco, la novia a bordo de una limusina, recoge el portal británico.
Horas más tarde, cerca de Downing Street se vio caminando a un grupo de músicos, que posiblemente venían de tocar en la boda.
Carrie Symonds, hoy primera dama, es la antigua responsable de comunicación del Partido Conservador, equipo al que se incorporó en 2010: dos años más tarde trabajó en la campaña de Johnson para ser reelegido alcalde de Londres.
En 2018 dejó ese trabajo para encargarse de las relaciones públicas de la organización de conservación marina Oceana, recuerda BBC.