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Hace una semana ardió Troya en este paisecito cuando el cantante nacional Marko Jara cometió el “pecado” de equivocarse en una estrofa del Himno Nacional cuando le correspondió entonarlo en el previo de la pelea en que la boxeadora nacional Yokasta Valle defendió su título mundial de las 105 libras, de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), ante la venezolana Yenifer León.
Para peores, el intérprete de música ranchera tuvo el lapsus exactamente 24 horas antes de participar en la final del programa Dancing with the Stars, el pasado 10 de noviembre. La equivocación de Jara le fue cobrada como una afrenta patria del mayor calibre, las redes sociales ardieron desde el primer momento y medio mundo pasó el domingo despotricando contra el cantante: no bastó con que este se disculpara desde el primer momento y confesara con toda transparencia que lo habían traicionado los nervios.
Se trata realmente de una situación que le puede pasar a cualquiera, es más, antes de leer la andanada de burlas e insultos contra Marko, al ver el video este y otros Topillos que disfrutábamos unas aguilitas con chifrijo aquella noche, coincidimos en el gran esfuerzo de concentración que tenemos que hacer cada vez que entonamos el final de nuestro hermoso himno, pues al final a veces se se nos enreda el “vivan siempre...” con el “blanca y pura” de la primera estrofa.
Ah no, pero para muchos Jara irrespetó uno de los símbolos nacionales (habrase visto semejante estupidez). ¡Seguro que lo hizo a propósito!, pero como la tontera a veces parece multiplicarse, también se quejaron porque el cantante varió la entonación de otras estrofas y también de que al final lo había interpretado sin ganas.
Una pizca de empatía habría bastado para entender que, una vez que Jara se enredó, más bien hizo mucho para que el mosquero no se le hiciera más grande, piensen: estaba en vivo, tuvo que apechugar con el error y tratar de enrolarse nuevamente en cosa de microsegundos, tratando de que no se le descarrilara por completo el asunto y más bien fue admirable cómo lo logró.
Por supuesto, hubo quienes salieron en defensa del “pecado” de Jara, como el tuitero Josema, quien escribió: “Gente que arrastra la bandera, la llena de birra, la moja en la Fuente de la Hispanidad con un gane de la Sele, pero un mae se equivoca con el himno, y ahí están indignadísimos. . .”.
También hubo quiénes señalaron incontables “irrespetos” contra otros símbolos nacionales, para no ir muy lejos, hasta criticaron a Keylor Navas, quien ciertamente es un orgullo patrio, pero en momentos de euforia se ha amarrado la bandera costarricense a la cintura. Es hilar muy fino, obviamente, pero ¿acaso no lo hicieron con el caso de Marko Jara?
Por suerte, al parecer el cantante pasó su mal trance y luego se pudo concentrar en el reto del domingo. Si bien no ganó la competencia de baile, hay que decir que se desenvolvió muy bien, más de uno en su lugar hasta se habría retirado de Dancing después de la basureada colectiva tan ingrata e injusta que se llevó. Como todo, ya pasó. Marko se disculpó mil veces y las hienas de las redes quedaron muy felices, suponemos, tras tener en qué entretenerse el fin de semana, disparando sapos y culebras por la “afrenta” patria. Qué horror.
Y bueno, siempre con el recién finalizado DWTS, hay que ver como cada participante capitaliza la alta exposición que tuvieron en los últimos meses, sobre todo los finalistas. Uno que perdió pero ganó fue Greivin Morgan, modelo y pequeño empresario quien, hay que decirlo, era considerado como el gran favorito desde el principio del programa. Posiblemente él también tenía grandes esperanzas pero bueno, ya se sabe que Rosalinda (Sofía Chaverri) y su bailarín, Javier Acuña, ganaron por “tandeada” y se convirtieron en la gran sorpresa de la noche.
Aún así, Morgan manejó muy bien el honroso segundo lugar, sus felicitaciones a los ganadores y el agradecimiento para con Televisora de Costa Rica se percibieron muy sinceros. Eso sí, sabedor del arrastre que ha tenido por cuenta de su espectacular físico, apenas pudo puso pies en polvorosa y se fue con su novia, Sheiris Montero y su bailarina, Lucía Jiménez, a disfrutar ese paraíso que es Manzanillo de Puerto Viejo, desde donde ha posteado varias infartantes fotos, como la que mostramos en esta nota.
Desde antes de que terminara el programa, Morgan ya había sido contactado por varias marcas importantes, con las que tiene ya diversos proyectos amarrados. Por ahora, se está tomando un merecido descanso y vaya lugar que eligió para su detox. Cuiao pierde, como dicen.
No podemos estar más felices de ver el éxito rotundo que tuvo la puesta en escena de las incansables y ya icónicas María Torres y Marcia Saborío, quienes vieron agotarse las funciones de Lo mejor de Gallito Pinto en un tris, tras presentarse en el Teatro 1887, del Centro Nacional de la Cultura, y luego debieron abrir más funciones a petición del público. Ergo, se presentarán el sábado 23 de noviembre en dos funciones en el Teatro Eugene O’Neill del Centro Cultural Costarricense Norteamericano –en barrio Dent–.
La verdad es que no solo se trata de que el show de este par de mujerones y artistazas sea prácticamente para ahogarse de la risa, como nos ocurrió el sábado que fuimos a verlas, sino que fue realmente hermoso ver cómo no dejan nada al azar, de manera que una de sus asistentes está pendiente de que todo el mundo esté cómodo mientras hacen fila y, si ven adultos mayores, los dirigen hacia el teatro y los ubican cómoda y cariñosamente en el espacio que ellos quieran, así sea en primera fila, además, con merienda y todo. ¿Dónde se ha visto?
Estos detallazos y la reinvención de su humor, cada vez más avipado y más depurado, sin caer jamás en lo chabacano, las agigantan cada vez más. Vale que están bien pochotonas y llenas de energía, porque a como van no creemos que puedan zafarse de unas cuantas funciones más en diciembre, pues muchísima gente gastará gustosa una parte de las platicas de diciembre para ir al encuentro de las reinas del humor del bueno a lo puritico Tiquicia.
A principios de este año, la presentadora de De boca en boca, Monserrat del Castillo, nos confesó que, a sus 30 años, ya tenía intenciones de formalizar una relación, casarse y tener hijos... y vaya que todo se le cumplió en cosa de meses, pues Monsi se comprometió desde mediados de año, ella y su novio, el empresario mexicano Jhona Monroy, y la cosa es que entre los preparativos de la boda, que será el próximo 30 de noviembre, adelantaron la cigüeña y ya la hermosa y simpática presentadora tiene tres meses y medio de embarazo.
Nos alegramos de corazón por todas las buenas nuevas y le deseamos a Monserrat que, más adelante, se le cumpla otro de sus grandes sueños: licenciarse en enfermería, pues tal vez casi nadie lo sepa pero Del Castillo afirma traer la vocación de cuidar de personas enfermas desde su más tierna infancia, así que no nos extrañemos y en un tiempo prudencial, ya cuando su bebé esté más crecidito, la veamos bien empunchada en la universidad.
¡Ya casi! Ya casi arranca la temporada alta para varios productos navideños y, a no dudarlo, unos que harán su agosto serán los dueños del Vivero El Zamorano, ubicado en San Isidro de Heredia y que se convirtió en todo un boom después de que el hijo de los propietarios, Hermas Martínez, subiera en sus redes una foto con cientos de pastoras a sus espaldas, anunciando la venta de estas plantas tan apetecidas para adornar las casas en Navidad.
Las fotos, los memes, y las declaraciones de admiración y mucho más, convirtieron al muchacho en una celebridad criolla de un día para otro, y fue objeto de decenas de entrevistas en diversos medios. Luego, el furor por las pastoras se aplacó con el verano... pero resulta que por estos días, el presentador Yiyo Alfaro refrescó la memoria colectiva al subir en sus redes una foto de él con su mamá, justamente comprándole pastoras a Hermas, quien visto lo visto, luce todavía más guapetón que el año pasado.
Intenso año ha tenido la Miss Costa Rica 2018, Natalia Carvajal, quien cerrará este 2019 como co-conductora de El Chinamo, junto con la presentadora de Qué buena tarde, Keyla Sánchez, quienes a no dudarlo conformarán una tremenda dupla y, a la vez, harán un relevo generacional ante la ausencia de las otrora presentadoras por muchos años, Nancy Dobles y Viviana Calderón.
Natalia también ha tenido un año socolloneado en lo amoroso, pues a principio de año se conoció que había roto el compromiso con su prometido, André Solano. Los motivos de la ruptura nunca trascendieron, aunque sobraron las especulaciones. Sin embargo, la joven pareja al parecer retomó la relación en las últimas semanas, solo que, al parecer, esta vez prefieren llevarla con bajo perfil y fuera de los dimes y diretes en redes sociales. Madura decisión.
Otra que va escalando gradas en simpatía, reconocimiento y belleza, es Keyla Sánchez, quien debutará junto a Natalia en El Chinamo. Como le hemos augurado en varias ocasiones, ella lo tiene todo para convertirse en un figurón de la tevé nacional.
Y bueno, estamos muy esperanzados con una noticia televisiva criolla que trascendió esta semana, cuando el Sistema Nacional de Radio y Televisión, (SINART), presentó un verdadero ramillete de estrenos que incluyen una revista matutina, una serie de comedia, un programa en el marco del bicentenario de la Independencia de Costa Rica y hasta un reality de cocina, según informó la periodista Lorna Chacón, presidenta ejecutiva del canal estatal, que por lo visto va a entrar a competir de lleno en este 2020 con espacios dinámicos, novedosos, divertidos, oportunos y educativos.
En la edición digital de esta columna se encuentra el link de Nacion.com en el que se explica en detalle cada espacio. Nos parece un tremendo y valiente reto pero, a juzgar por los contenidos, de los cuales tuvimos algunos avances, realmente Canal 13 tendrá una remozada parrilla de agenda propia a la que le auguramos un saludable recibimiento por parte de las audiencias. Aplauso de pie para Chacón y su equipo.
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