Hay algo de mentira en este título, no la estoy viendo, la vi. Esta serie es del año 2016 y fue producida como contenido original de Netflix para Japón.
Al igual que la mayoría de los que leen esta columna, generalizo arbitrariamente, estoy viendo alguna(s) serie(s) que estuvo nominada a algún premio o que me recomendó Netflix en su correo personalizado, o sea también estoy viendo una serie de moda y que se publicita bien, de las que habla todo mundo.
Hay algo de verdad en este título porque, aunque ya la terminé, Midnight Diner: Tokyo Stories es una serie que consulto ocasionalmente, su estructura dramática permite que se vea cada capítulo individualmente sin necesidad de información previa. Así que me sostengo sobre esta media verdad para recomendárselas en esta columna.
“Cuando la gente termina su día y se apresura para llegar a su casa, empieza mi día”, se escucha la voz del maestro del ‘Restaurante de Medianoche’ abrir cada capítulo, luego explica que aunque su menú es reducido a: “Sopa de miso con cerdo, cerveza, sake y Shochu”, prepara cualquier plato siempre y cuando tenga los ingredientes; sobre esta idea de variedad y multiplicidad de posibilidades se sostiene la serie.
Todos los capítulos transcurren en la noche y cada uno tiene como personaje a alguno de los comensales del restaurante, al que por cierto, a pesar de su extraño horario no le faltan clientes.
Las personas a las que le transcurre la vida en la noche, es muy diferente a la que vive de día, llevo algunos meses trabajando en un proyecto y puedo asegurarlo a partir de la experiencia de conocerlos. Los personajes pueden resultar exóticos y cada uno es bastante distintos del otro: humoristas, locutores de radio, oficinistas, tejedoras, personas peculiares que se enfrentan a problemas mundanos y ordinarios son quienes nos invitan a reflexionar sobre dilemas que parecen sin importancia.
El maestro es un personaje sabio que conversa con todos sus clientes y les da consejos, y aunque la serie está ubicada en Japón, no hay mucha diferencia entre eso y lo que encontramos en algún bar de San José (que lo diga Jorge, de La Bohemia).
Esta serie es una oportunidad para conocer de la cultura japonesa y asombrarse de encontrar tantos puntos en común.
Hago la anotación que la serie tiene una atmósfera melancólica, perfecta para los días de temporal y mi recomendación es no verla con hambre, porque cada platillo se ve increíble.
Midnight Diner: Tokyo Stories consta de 10 capítulos, de aproximadamente 24 minutos cada uno y está en un rincón de Netflix, olvidada, por lo que mejor es buscarla directamente por su nombre. ¡Buen provecho!