A las 7:48 a. m. de este domingo, el Cuerpo de Bomberos atendió un derrame de gasolina en el poliducto de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) unos 200 metros al oeste de la entrada de Freehold, distrito de Pacuarito en Siquirres, Limón.
El caso se investiga como un posible robo de combustible de los ductos, instalados en paralelo a la carretera José Joaquín Trejos, o ruta San José - Limón.
Miguel Alfaro Hernández, oficial al mando de los bomberos, dijo que no hay personas heridas ni afectadas por el derrame, el cual fue controlado poco después, luego de que se coordinó con personal de Recope y de la Fuerza Pública.
El derrame de combustible tipo Jet A-1, también obligó a coordinar personal de Ministerio de Salud y del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
El combustible que cayó al suelo fue contenido por un dique y las condiciones del tiempo en la mañana fueron favorables para que el combustible no fluyera aguas abajo de una acequia cercana.
Los bomberos se retiraron del sitio a las 11:06 a. m., luego de que funcionarios de Recope colocaron una prensa en el tubo de seis pulgadas para detener la salida de la gasolina.
Yeudy Chavarría, bombero, dijo que en apariencia la tubería fue vulnerada a raíz de un robo, pues la Policía encontró indicios de acarreo e inclusive, cruzando la ruta 32, había un acceso cercano y había rastros de un vehículo en el sitio.
La Policía no tiene sospechosos todavía, pero el caso quedó en investigación.
A las 4 p. m. el OIJ de Siquirres no había recibido la denuncia del caso por parte de los interesados.
En abril pasado, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detuvo a un individuo con antecedentes penales, como sospechoso de robar combustible del poliducto en Río Blanco de Limón, a unos 25 kilómetros de donde se detectó la fuga este domingo.
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En esa ocasión el director del OIJ, Wálter Espinoza, confirmó que al oleoducto se había conectado un conducto que llevaba a una vivienda, a 25 metros del lugar del derrame, lo que despertaba las sospechas de una sustracción.
En el inmueble los agentes encontraron dos tanquetas con gasolina súper y en las afueras también había dos camiones cisternas llenos de combustible que había sido sustraído del oleoducto.
El detenido esa vez fue un individuo de apellidos Araya Solano, de 27 años, que quedó a la orden de la Fiscalía como sospechoso de la sustracción.