Un avión de la aerolínea American Airlines no pudo aterrizar la noche del sábado en el aeropuerto de Liberia debido a una supuesta ‘falla de comunicación’ entre controladores aéreos.
El director de Aviación Civil, Álvaro Vargas, dijo a La Nación que la aeronave venía desde Dallas, Estados Unidos, con dirección a El Salvador.
Sin embargo, no pudo aterrizar en ese país debido al mal tiempo y, tras presentar un “problema de combustible”, solicitó un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto Daniel Oduber Quirós, cerca de las 11:50 p. m.
Vargas indicó que como el aeropuerto de Liberia cierra a la medianoche, negó el aterrizaje. Además, aseguró que el controlador aéreo costarricense no sabía que la aeronave tenía una emergencia.
“Nosotros recibimos una comunicación el día sábado a las 11:53 p. m. donde se nos dice de parte de Cenamer (Centro de Control de Área de Centroamérica) que el avión de American está pidiendo permiso para aterrizar en Liberia. El control le dice que Liberia está cerrado y que está disponible Santamaría.
“Nunca se nos dijo de parte del control de Cenamer que la aeronave tenía emergencia, esa información hasta hoy lunes la obtuvimos”, declaró Vargas.
El Cenamer está a cargo del espacio aéreo superior, por encima de los 19.000 pies. Por debajo de esa altitud están los controladores aéreos de cada país.
De acuerdo con el director de Aviación Civil, al final el avión logró aterrizar en el Aeropuerto Internacional La Aurora de la Ciudad de Guatemala.
Además, indicó que desconoce porqué el piloto solicitó aterrizar en Costa Rica, pero que cree que fue porque el aeropuerto de Liberia “está al nivel del mar, lo que da mejor rendimiento a las aeronaves”.
Mediante un comunicado de prensa, la Dirección de Aviación Civil expresó que “el actuar del personal del Centro de Control de Liberia fue el correcto”.
“Sobre los motivos del porqué se gestionó la información de esta manera por parte del Centro de Control Cenamer no podemos pronunciarnos, puesto que la investigación del evento corresponde a las autoridades de esa organización y está en curso, misma de la que el Programa de Seguridad Operacional del Estado de Costa Rica participará en calidad de observador, para conocer las recomendaciones que se generen en busca de generar medidas de mitigación que reduzcan la probabilidad de que un evento igual o similar como este se repita.
“Adicional, la Dirección General de Aviación Civil de Costa Rica expresa que, en caso de habernos enterado de la condición de emergencia del vuelo, el Aeropuerto Daniel Oduber Quirós se habría mantenido abierto, aún pasada la medianoche, todo el tiempo que fuera necesario, a la espera de la aeronave para darle toda la asistencia necesaria, y así se hará en casos similares como este”, dice el comunicado.
La Nación le consultó al gerente regional de American Airlines para Centroamérica, Rafael Sánchez, sobre el aparente problema que tuvo el avión.
Sin embargo, afirmó que desconocía sobre la situación y que iba a solicitar la información del caso para remitirla a este diario, aunque al cierre de esta nota no se obtuvo respuesta.
‘Mala coordinación’
El presidente del Sindicato de Controladores de Tránsito Aéreo (Sitecna), Ronald Vega, declaró a La Nación que lo que ocurrió el sábado es inaceptable desde todo punto de vista, “especialmente en tema de seguridad y protección a los pasajeros”.
Asimismo, apuntó que negarle el servicio a una aerolínea norteamericana después de recuperar la máxima nota en seguridad aérea de ese país “no se ve para nada bien”.
“Nosotros como controladores aéreos nunca tuvimos conocimiento de que la aeronave estaba en emergencia, no nos lo informó el Cenamer. Esta falla de comunicación no solo involucra a ellos sino también indirectamente a nosotros.
“Si a mí me preguntan si me puedo quedar a recibir una aeronave con una emergencia de esta clase, por supuesto que yo me quedo el tiempo que sea necesario”, aseveró Vega.
El presidente del Sitecna indicó que la información que recibieron este lunes fue que el avión llevaba alrededor de 150 pasajeros y que tuvo un problema de combustible. “Incluso circuló un audio por redes sociales”, añadió.
Asimismo, reclamó que desde hace varios años han alertado por la falta de personal en el aeropuerto de Liberia y la necesidad de que trabaje las 24 horas, los siete días de la semana.
“En la comunicación que hubo, el piloto expresamente dijo ‘necesito irme a Liberia’ y o sea eso es preocupante porque nosotros podíamos dar ese servicio y atender una aeronave que está en una situación de estrés y emergencia, y que fue negada por una mala coordinación”, subrayó el sindicalista.
Vega considera que la Dirección de Aviación Civil de Costa Rica tiene que pedirle explicaciones a Cenamer por la falla de comunicación, con el fin de que no vuelva a ocurrir otro problema de este tipo.