Una lancha pesquera deportiva, dotada de tres motores, fue detenida el miércoles cuando transportaba 348 kilos de cocaína.
La captura la ejecutaron las autoridades en un operativo que se realizó al mediodía en el océano Pacífico, a 55 kilómetros de distancia de Cabo Blanco, en Puntarenas.
Como sospechosos del trasiego se detuvo a tres costarricenses apellidados Calderón Ciezar, de 43 años; Espinoza Aparicio, de 37 y Canales Méndez de 47. Asimismo, se capturó a dos ecuatorianos apellidados Montaño Quirós de 21 y Cacón Benitez de 18 y una guatemalteco, Fermeño Zepino, de 33.
Los implicados en el delito de tráfico internacional de drogas fueron puestos a la orden de la Fiscalía Adjunta de Puntarenas, donde se espera indagarlos y luego presentarlos al Juzgado Penal de Puntarenas para que le dicten la medidas cautelares.
Llamada confidencial alertó
La pesquisa que llevó a las autoridades a este decomiso de droga inició el pasado martes, cuando se recibió una llamada confidencial en la cual indicaba que estaba próxima a ingresar por el Pacífico una embarcación que provenía de suramérica y transportaba droga.
Fue así como en un trabajo conjunto en el que participaron agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Puntarenas, de Heredia, oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas (SNG), de la Policía de Control de Drogas (PCD) y agentes de Administración para el Control de Drogas (DEA) por sus siglas en inglés, lograron identificar la embarcación y proceder con la captura.
La lancha en que trasladaban la droga se llama Happy Happy y tiene la matrícula P-11340. Según el Registro Nacional se trata de una embarcación de fibra de vidrio, que mide seis metros de largo y dos metros de ancho. La fabricaron en Chomes, Puntarenas, en el 2007, para dedicarla a la pesca artesanal y está inscrita a nombre de un costarricense de apellido Vásquez, de 51 años.
La droga la transportaban en 13 bultos, los cuales contenían un total de 248 paquetes de aproximadamente un kilo cada uno de clorhidrato de cocaína.