Gustavo Mata, ministro de Seguridad, asegura que “Costa Rica se ha convertido en una bodega de Jamaica” y esa droga se destina tanto para consumo nacional como internacional.
“A la par de esa droga, vienen las organizaciones criminales que han generado toda esta incidencia de homicidios dolorosos. Limón ha sido de los lugares con mayor problema en ese sentido”, comentó Mata.
Datos policiales revelan que una libra (460 gramos) de marihuana jamaiquina (alta calidad), conocida como high red tiene un precio ¢800.000; la colombiana (regular calidad), ¢400.000, y la costarricense (mala calidad), ¢80.000. Actualmente, un cigarrillo de esta droga revuelta se vende en el mercado en ¢1.000. Hace pocos meses, un cigarro tenía un valor de ¢1.600.
Para las autoridades, esto significa que en el mercado hay bastante marihuana.
“Se ha dado una mayor siembra de marihuana en Costa Rica, es una variedad que tiene menor potencia que las extranjeras; sin embargo, sabemos que la mezclan y eso está generando un producto más barato, que se está consumiendo y que, desde mi perspectiva, ya ha desplazado el consumo de tabaco en el mercado nacional”, añadió el responsable de la cartera de Seguridad.
Mata enfatizó en la necesidad de más presupuesto para la Policía, que requiere comprar radares y embarcaciones para cubrir un área de 240 kilómetros en el Caribe y poder así hacerle frente al trasiego de la droga procedente de Jamaica. Según dijo, pese a las carencias, se ha luchado fuertemente contra el trasiego de drogas. “Tanto es así que este es el gobierno que más ha decomisado marihuana procedente de Jamaica”, aseveró.