EscucharUn oficial del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) detalló este martes en un juicio, las múltiples heridas que tenía el cuerpo de una mujer asesinada, al parecer a manos de su hijo.
El agente Romel Morales Solano atendió, el 31 de enero del 2018, un aparente caso de violencia doméstica en el caserío Dique Los Ángeles, en Guadalupe de Cartago; sin embargo, cuando llegó a la vivienda se encontró con el homicidio de Sonia Navarro Rojas, de 67 años.
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El joven, de apellido Rojas, permanece recluido en un centro para enfermos mentales en conflicto con la ley. Foto Keyna Calderón.
Los oficiales de la Fuerza Pública, que acudieron minutos antes, ya habían contenido al presunto homicida, un hijo de la víctima, de 24 años, con aparentes problemas mentales.
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Según Morales, la fallecida presentaba entre 12 y 17 puñaladas en la parte superior de la espalda (algunas perforaron el pulmón, lo cual le pudo haber impedido respirar con normalidad) y una cortadura profunda en el cuello.
Se cree que el joven, de apellidos Rojas Navarro, después de atacar a su mamá, la trasladó a un cuarto.
Cuando el investigador llegó a la escena la fallecida ya tenía rigidez en las piernas y al parecer la causa de la muerte fue por degüello.
Ese día, cuando el presunto homicida le abrió la puerta a al oficial de Fuerza Pública, este le preguntó por la madre y el simplemente le contestó: “Pase, pero no creo que le conteste”.
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En el sitio, el agente decomisó un cuchillo pequeño (cerca de la fallecida), otro más grande a 2 metros del cuerpo de la mujer, otro de similar tamaño a este último en el tanque de la pila y sobre un mueble una rasuradora toda desarmada y las navajillas tenían sangre.
El juicio contra Rojas continuará el jueves 7 de febrero, en Cartago, cuando declaren un psiquiatra forense y otro investigador.
Al sospechoso se le vencía este lunes la medida cautelar de internamiento en el Centro para la Atención de Enfermos Mentales en Conflicto con la Ley Penal (Capemcol), ubicado en La Uruca, pero le fue ampliada hasta el 07 de febrero.
Como parte de las pruebas aportadas por la Fiscalía, además de los testigos, presentaron 157 fotografías tomadas en el lugar el día de los hechos.
