Árboles que fueron derribados por los fuertes vientos dañaron, al menos, 10 viviendas, informó ayer la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).
Wálter Fonseca, de la CNE, dijo que los casos sucedieron entre lunes y martes en Tilarán de Guanacaste, Limón, San Carlos de Alajuela, Acosta de San José, Santa Bárbara y en San Rafael de Heredia.
Un hecho dramático se presentó ayer a la 1 p. m., cuando un higuerón destruyó la casa de Esther Castillo Martínez, en calle Damas de Aguas Zarcas de San Carlos.
Precisamente la perjudicada, quien tiene nueve meses de embarazo, estaba dentro de la vivienda junto a dos hijas menores. Todas resultaron ilesas.
Rodolfo Alpízar, del Cuerpo de Bomberos, comentó que el árbol dañó, por lo menos, un 80% de la casa, que mide 56 m².
“Fue un milagro que la mujer y las niñas no resultaran afectadas porque la casa quedó inhabitable”, expresó Alpízar.
Origen y otras afectaciones. El Instituto Meteorológico Nacional (IMN) informó de que los vientos, cuyas ráfagas fueron ayer de entre 60 km/h (en partes bajas del Valle Central) y los 120 km/h (en las partes montañosas), son ocasionados por un sistema de alta presión, el cual se ubica en el golfo de México. El fenómeno se mantendrá hoy y se espera que disminuya su influencia en el país, a partir del jueves.
Mientras tanto, el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) y Coopeguanacaste dijeron que entre lunes y martes dieron atención a 466 averías en el tendido eléctrico. Las afectaciones fueron por desconexión del sistema para protección o porque ramas o árboles reventaron cables, quebraron postes y transformadores. El ICE estimó los daños en ¢34 millones. Colaboraron con esta información los corresponsales Carlos Hernández, Julio Segura, Francisco Barrantes y Cinthya Bran.