Un joven de unos 25 años, cuya identidad no trascendió, fue hallado este mediodía asesinado de dos aparentes disparos en el rostro y con dos piedras de considerable tamaño encima del cuerpo.
El hallazgo lo efectuaron dos pescadores que permanecían en las márgenes del río San José, en Colonia Villalobos de Río Frío, en Sarapiquí, Heredia.
La víctima estaba boca arriba, vestía una pantaloneta y no tenía camisa, según información de la Fuerza Pública que llegó al sitio.
Primeras versiones indican que la piedra que le colocaron en el estómago pesaba al menos 50 kilos, mientras que otra colocada en el brazo derecho unos 10 kilos. Al parecer, el objetivo de los homicidas era que se hundiera con el paso de las horas.
El sitio del asesinato es frecuentado por personas que circulan a pie, bicicleta y motocicleta, por lo que se sospecha que el hecho fue cometido durante la noche u horas de la madrugada.
Inés Rodríguez, vecina que habita en las cercanías al poblado, manifestó que lo ocurrido fue sorprendente, ya que ella tiene un hijo que estaba inmerso en las drogas, el cual está en la actualidad en un centro de restauración en San José.
“Mi hijo se perdía por tres, cuatro días y uno pasaba en vela. Me parece que el mensaje de las piedras es para que otros jóvenes se pongan vivos. Nunca ha ocurrido algo similar acá. Esto es preocupante. Hasta nosotros como vecinos tenemos que tener mucho cuidado”, dijo asombrada Rodríguez.
El caso es investigado por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Sarapiquí, quienes trasladarán el cuerpo al Complejo de Ciencias Forenses en San Joaquín de Flores, en Heredia.
En lo que llevamos del año ya suman 489 los homicidios en el país, mientras que para esta misma fecha del año pasado se contabilizaban 512 asesinatos.