Las lesiones en piernas, brazos y cabeza son las más comunes entre los motociclistas accidentados que llegan al Hospital del Trauma a recibir atención.
Esteban Araya, jefe de Servicios Quirúrgicos del centro médico, detalló que las fracturas de tibia y peroné son las más frecuentes, seguidas por las de huesos del pie, fémur, pelvis, clavícula y muñecas.
A ese hospital llegan los pacientes luego de ser estabilizados en centros de salud cercanos al sitio del accidente. Solo el año pasado, allí se atendieron 18.568 motociclistas.
“Hacemos entre 900 y 1.000 cirugías al mes, y hemos tenido un aumento de hasta el 35% de demanda. De los que llegan a este hospital, el 99% necesitan cirugía”, acotó Araya.
Añadió que el órgano vital más afectado es el cerebro, por los traumas craneoencefálicos.
Según detalló, algunas personas padecen secuelas neurológicas, se les daña la médula espinal y ya no tienen control de sus piernas. Otros sufren una lesión cerebral que les altera su capacidad cognitiva o la motora.
“Al menos un paciente de los que ingresan por semana va a tener problemas permanentes”, manifestó el médico.
Por ello, el hospital tiene especialistas en fisiatría, fisioterapia, terapia del lenguaje, terapia ocupacional, trabajo social y psicólogos, entre otros.
Del año 2010 a lo que va del 2016, hubo 28 conductores de moto cuya incapacidad superó los 500 días.
Araya detalló que cuando un paciente llega con una fractura en miembros inferiores, se interna por un par de días hasta que va al quirófano y dos días después se le da de alta.
Si hay lesión de piel o de músculos, puede quedarse una o dos semanas. Pero si sufre un trauma craneoencefálico, puede tardar tres o cuatro meses.