Un operario del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) falleció luego de que el automóvil en el que viajaba cayó a un precipicio de 180 metros de profundidad.
El accidente ocurrió ayer, a eso de las 4 a. m., en el sector conocido como Ventana B, de Tucurrique, en Jiménez, Cartago.
La víctima fue identificada como Bryan José Jiménez Castillo, de 23 años de edad.
Jiménez trabajaba como operador de grúa en el proyecto de ampliación del ICE en Cachí de Paraíso, Cartago.
Detalles. Según informaron las autoridades, la víctima viajaba en su vehículo particular, marca Honda, cuando ocurrió el accidente en el que perdió la vida.
Los oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) presumen que Jiménez pudo haberse quedado dormido mientras conducía, por lo que se salió de la carretera y cayó al precipicio.
Cuando los socorristas de la Cruz Roja llegaron al lugar, Jiménez ya había fallecido.
Marcos Fallas Camacho, vecino de la zona de Los Santos y también operario del ICE, logró identificar al fallecido, ya que eran compañeros de trabajo.
Fallas manifestó que la víctima salió de Tucurrique en horas de la madrugada, pero que desconocía hacia dónde iba cuando ocurrió el accidente.
Añadió que Jiménez estaba soltero, no tenía hijos y vivía en La Garita de Alajuela.
Alerta. Nils Ching, director regional de la Fuerza Pública de Cartago, informó de que la alerta fue recibida en la delegación, hacia las 5:15 a. m., por medio de una llamada telefónica anómina.
En la llamada informaron de que en el sector de Ventana B se oían gritos pidiendo auxilio desde un precipicio.
Cuando las unidades policiales llegaron al lugar, observaron en la calzada las marcas de frenado de un carro, en dirección al guindo.
Los policías lograron identificar entre la maleza un automóvil en el fondo del precipicio, a unos 180 metros de profundidad.
Los oficiales no lograron escuchar los gritos que habían reportado vía telefónica.
Los policías, de forma inmediata, solicitaron ayuda a la Cruz Roja y a Bomberos.
Rescate. Al llegar al sitio, los socorristas iniciaron el descenso y, aproximadamente a 140 metros de profundidad, encontraron los restos de Jiménez.
Los paramédicos indicaron que el cuerpo ya se encontraba rígido, por lo que presumen que, cuando lo hallaron, tenía unas seis horas de fallecido.
Los rescatistas localizaron el vehículo en el que viajaba la víctima, unos 40 metros más abajo de donde encontraron a Jiménez.
Las autoridades indicaron que el carro se encontraba partido por la mitad.
A las 7:17 a. m., la jueza Emma González delegó en la Cruz Roja la extracción del cuerpo.
Debido al difícil acceso a la zona donde estaba el cadáver, los socorristas no lograron sacar los restos de la víctima hasta las 10:13 a. m.
Posteriormente, los agentes judiciales trasladaron el cuerpo de Jiménez a la Morgue Judicial, ubicada en San Joaquín de Flores.
Sin barandas. Según los cruzrrojistas, la sección de la carretera donde ocurrió el accidente es una zona bastante peligrosa, debido a los precipicios que la rodean.
La falta de barandas es uno de los principales factores que aumentan los riesgos en esta vía.
Andrés Quirós, quien labora en la Cruz Roja de Cartago, informó de que el auto de la víctima quedó cerca de un vehículo que pertenecía a un hombre que falleció en un accidente de tránsito, en el mismo sector, hace unos diez años.
Quirós aseguró que, debido a la profundidad del precipicio y al difícil acceso, es imposible sacar los autos del guindo.
Precaución. Marcelino Rivera, vocero del proyecto de ampliación en Cachí, señaló que ellos conviven diariamente con los riesgos que presenta esta carretera.
Rivera también comentó que la zona donde se dio el accidente, se caracteriza por las constantes lluvias y la presencia de neblina.
“Es un sector con muchas curvas, por lo que es un tramo bastante complicado” agregó .
Ante esta situación, el ICE se encuentra desde hace varios meses colocando barandas a la orilla de la carretera para prevenir accidentes como el ocurrido ayer.