La motocicleta en la que viajaban las tres adolescentes que fallecieron accidentalmente el jueves en San Isidro de Peñas Blancas, San Ramón, circulaba irregularmente y con muchas deficiencias. No aparece inscrita, por lo que no se sabe quien es el legítimo dueño. Tampoco tiene placa, ni la revisión técnica de Riteve. El sistema de frenos está muy deteriorado. Además carece de luces delanteras, espejos retrovisores y las llantas están muy desgastadas. llantas lisas de la moto
La Policía del Tránsito confirmó que la moto no aparece inscrita, por lo que no se sabe quién es el legítimo dueño. Tampoco tiene placa ni la revisión técnica de Riteve.
Asimismo, el sistema de frenos está muy deteriorado, carece de luces delanteras, espejos retrovisores y las llantas están desgastadas.
Las revelaciones las hizo ayer Álvaro Cruz, jefe de la Delegación de la Policía de Tránsito de La Fortuna de San Carlos, que ve la zona de Peñas Blancas de San Ramón.
Cruz dijo que tales deficiencias, más el exceso de pasajeros y la alta velocidad a la que circulaba, causaron el percance el jueves.
Todos son vecinos de Chachagua, hacia donde se dirigían tras ir a un festival deportivo en el Colegio de Valle Azul de San Ramón.
El menor de 17 años no tenía licencia, informó la Policía del Tránsito. Este joven, quien labora como ayudante de mecánica, está internado en el Hospital México, en condición delicada. Los cuatro cayeron al vacío (unos 70 metros) luego de que la moto se estrelló contra una baranda del puente sobre el río Peñas Blancas.
En sus calles se percibía un marcado ambiente de consternación y tristeza, con vecinos de las víctimas abrazados y llorando con parientes de las adolescentes.
En la entrada al Liceo de Chachagua, donde dos de las fallecidas –Reyes y Cruz– cursaban el sétimo año, se colocó un lazo negro en señal de luto.
Empero, también emergieron los gestos de solidaridad pues un grupo de jóvenes emprendieron una colecta para ayudar económicamente a las familias dolientes.
Con ese fin recorrieron las calles del pueblo y cuatro horas después habían recaudado alrededor de ¢300.000, que servirán para financiar los gastos del funeral, previsto para hoy después de las 8 a. m.