Tres años y tres días transcurrieron desde el homicidio del periodista Julio Acuña Aguero y la profesora Yoselín Rojas Chinchilla, quienes aparecieron sin vida el 19 de junio del 2008.
¿Quién los mató? La respuesta a la incógnita se desconoce a la fecha, y la impunidad sigue siendo la protagonista. Incluso, la Fiscalía solicitó al Juzgado Penal de Hatillo el 6 de setiembre del 2010 desestimar la causa por falta de pruebas.
Las autoridades judiciales aún no han logrado capturar a los responsables de asesinar a la pareja, aunque entre los principales sospechosos figuraban los dos sujetos que atacaron a tres empleadas del casino White House, en Escazú, el 28 de octubre del 2008, pues el modus operandi era muy similar.
La viuda de Acuña, Tania Álvarez, comentó a La Nación : “Quiero recordarle al OIJ que todavía no ha terminado su trabajo porque quiero que mi hijo (de 5 años) comprenda por qué no tiene a su papá”.
A pesar de ese deseo, la mujer reconoció que ha perdido esperanzas de llegar a saber qué pasó. “Hemos dejado de preguntar. Las veces que hemos ido, han sido muy groseros; entonces decidí no volver a molestar. Nos dijeron que nunca se iba a saber nada; entonces, ¿para qué íbamos a llegar ahí?”.
Acuña murió de tres balazos: en el pómulo, un brazo y la mano derecha. Fue localizado a las 5:14 a. m. a un lado de la vía en el llamado Codo del Diablo, en el trayecto entre El Llano y la ciudad de Alajuelita.
El periodista había departido en un bar con la profesora la noche anterior. Ella fue hallada a las 6 a. m. en una cuneta de la autopista Próspero Fernández, cerca de la intersección con la vía hacia Escazú. Estaba totalmente desnuda y presentaba dos balazos en la cabeza.
Olga Chinchilla, madre de la profesora, manifestó: “Yo estoy decepcionada. No nos han llamado para saber qué pasó con el caso ni quiénes fueron...”.