Pasó de ayudar en el teatro de marionetas checas de su tatarabuelo a trabajar lado a lado con Steven Spielberg, Woody Allen y Wes Anderson y a crear de cero escenarios enteros de producciones de Broadway. El innegable talento para materializar mágicos escenarios del papel a la pantalla grande ha llevado a Carl Sprague a sorprender a los cinéfilos con conceptualizaciones como las de los filmes Gran Hotel Budapest y Moonrise Kingdom, de Wes Anderson.
Ha trabajado en el departamento de arte de más de 30 películas, incluyendo la ganadora del Óscar como mejor película 12 años de esclavitud, dirigida por Steve McQueen. Fue quien creó el concepto artístico de películas como Amistad, de Steven Spielberg, La red social, de David Fincher y La edad de la inocencia, de Martin Scorsese.
En el marco de su visita como plato fuerte de los expositores del sexto Festival Internacional de Diseño (FID), este artista del séptimo arte conversó con Perfil.
Perfil: ¿Cómo se convirtió en director de arte?
Carl: Dirigí mucho cine y teatro en la universidad y siempre me costó mucho encontrar diseñadores de escenografía para mis shows. Terminaba haciéndolo yo mismo y me di cuenta de que me gustaba más tratar con objetos que con los actores. Así, cuando terminé la universidad, pensé que el diseño podría ser una ambición más razonable que la dirección. Me tomó cerca de una década darme cuenta lo difícil que puede ser esta meta modesta.
Mi primer trabajo en cine fue conducir al decorador del set de Radio Days de Woody Allen. Me sentía en el cielo. Me despidieron el primer día de filmación. Aparentemente el sindicato de los Teamsters quería mi trabajo, y el decorador no estaba tan encantado conmigo. Me sentí devastado.
Continué mi camino y realicé algunos trabajos como asistente personal en películas, un poco de construcción de modelos para shows de Broadway, trabajé en teatro de presupuesto tan bajo que era una locura y además tomé algunos cursos para aprender a bocetear.
Tuve algunos breaks maravillosos en el camino. Fui asistente de diseño de Jerome Roberts en un musical que desarrollaba con Leonard Bernstein. Hice algunos proyectos con el mago de los efectos especiales Doug Trumbull. Además, me uní al sindicato de diseñadores de Nueva York. Justo después, fui increíblemente suertudo para ser contratado como asistente de dirección de arte en The Age of Innocence, de Martin Scorsese. Desde esa experiencia he estado constantemente ocupado.
P: ¿Puede contarnos un poco sobre su infancia?
C: Mi experiencia creciendo en la ciudad de Nueva York fue encantadora: excelentes escuelas y mucha exposición al arte y al teatro.
Una parte muy importante de mi infancia fue nuestro teatro de marionetas familiar. Mi tatarabuelo creó un bellísimo teatro tradicional checo de marionetas, que mi tatarabuela se encargó de expandir. Hice cientos de shows con las marionetas y aún presento este tipo de shows con regularidad.
P: ¿Disfruta más trabajar en cine, teatro, diseño comercial o eventos particulares?
C: Todo es interesante. Mi primer amor es el teatro pero el cine presenta oportunidades tan extraordinarias que es irresistible. Además, hay cierta permanencia en hacer cine. Si una película no se desvanece sin dejar rastro, puede persistir en la conciencia de las personas por un largo tiempo, casi como la arquitectura.
He hecho algunos comerciales. Son lucrativos, pero tontos. Me encanta trabajar con ballet y ópera. Me encantaría hacer más. Los eventos y la moda pueden ser alocados, pero es un mundo divertido.
P: ¿Cuánto investiga antes de aceptar ser el director de arte de una película?
C: Usualmente digo que sí de inmediato. No me puedo dar el lujo de decir que no al trabajo. Por supuesto que todo trabajo comienza con el guión y lo leo con detenimiento antes de aceptar el proyecto.
P: ¿Cuál ha sido el trabajo más gratificante que ha hecho?
C: Eso es como preguntar cuál de los hijos es el favorito. Mi trabajo es variado, a veces diseño y soy el responsable de la gran imagen y de liderar un equipo de personas, otras veces trabajo solo como artista de bocetos o como diseñador del set. Es innegable que trabajar con Wes Anderson y con Gregory Crewdson ha sido especialmente gratificante pues ambos están profundamente interesados en la creación del set.
P: ¿Puede hablarnos de su proceso de diseño?
C: Es esencial tener un concepto, por simple que sea. El diseño para cine debe contar una historia o comunicar una idea. A veces esta idea viene del director o del guión, otras veces sale de mí. El concepto puede ser obvio o puede ser un proceso de descubrimiento, que involucra mucha discusión, investigación, bocetos y búsqueda de locaciones.
Una vez que tengo una inspiración, el trabajo de hacer realidad la visión comienza. Investigar, dibujar, presupuestar, contratar, agendar, hacer ajustes, documentar, comunicar... ¡sin mencionar el hecho de filmarlo!
P: ¿Quién es su director favorito?
C: Fellini.
P: ¿Es verdad que usted es el favorito de Wes Anderson?
C: No creo que eso sea cierto, para nada. Algún periodista me puso así. He sido afortunado por trabajar en cuatro películas de Wes como director de arte o ilustrador de concepto. Wes trabaja con mucha gente y siempre es un privilegio ser parte de su proceso.
P: ¿Cómo es trabajar con Woody Allen o con Steven Spielberg?
C: Tanto Woody Allen como Steven Spielberg tienen un enfoque muy distinto en cuanto a diseño cinematográfico del que tiene Wes Anderson. Spielberg hace mucha preparación, pero puede ser muy espontáneo y creativo en el set. Woody Allen está enfocado en la historia y en crear un buen espacio para la acción. Él puede ser muy relajado con respecto a los detalles, pero cuando son importantes se va a ensañar en ellos instantáneamente.
P: Una vez dijo que usted solo es artista por necesidad. ¿Puede explicarnos eso?
C: Me refería a que me enseñé a mi mismo a dibujar para poder comunicarme. Hay muchos movimientos de manos y conversaciones que pasan por diseño. Para mí, el diseño real es algo que sucede con un dibujo.
P: ¿Tiene usted un toque personal al diseñar?
C: Constantemente me esfuerzo por ser flexible y cumplir con las necesidades de cada proyecto de forma original. Pero estoy seguro de que mi trabajo tiene algunos patrones predecibles, solo que me es difícil decir cuáles son.
P: ¿Cómo es trabajar con Miuccia Prada?
C: Ella es otra de las que toma decisiones rápidas. Es increíble ser parte del imperio que lidera. Mi visita fue muy corta y aún estoy conmocionado.
P: ¿En qué está trabajando actualmente?
C: Estoy haciendo un trabajo de ensueño. Diseño la nueva serie de Woody Allen para Amazon. No puedo adelantar mucho, pero es una oportunidad maravillosa que me han dado. Aún sigo sin creer que me llamaran. Nos estamos divirtiendo mucho y espero que la serie salga genial.