Desde la infancia, Andrea mostró un interés por la moda. Ha sido parte de su personalidad. De niña vestía distinto a sus compañeras, modificaba su ropa y le agregaba accesorios o estampados con pintura chiclosa.
Junto con su hermana gemela, Karolina, creó su primera empresa a los 10 años. Hacían prensas para cabello y las vendían en diferentes tiendas de su natal ciudad Palmares.
Esa vena fashionista se ha mantenido presente con el paso del tiempo. Tras graduarse de administración de empresas y su hermana de diseño industrial, decidieron ponerse una empresa propia. Con ayuda de una mentora en costura y cursos de confección, desarrollaron ropa bajo la marca "Abril". Exhibían las prendas en ferias de arte y la demanda fue creciendo, sin embargo, llegó el momento donde los costos de producción superaron sus capacidades.
"La empresa duró un par de años, económicamente no la pudimos sostener porque llegaron al país marcas grandes con precios muy bajos y producciones de maquila", explica Andrea. Ellas, en cambio, intentaban pagar salarios justos y competitivos a sus costureras, lo cual las obligaba a cobrar más caro por las prendas. Además, asegura que en ese entonces era difícil conseguir ciertas telas y materias primas.
No obstante, paralelo a la marca Abril había nacido el blog "Abril Moda" y tiempo después nació el blog "Desde el trópico". Las hermanas se dividieron las responsabilidades, Karolina se quedó con el blog de Abril Moda y Andrea continuó su parte con Desde el trópico, desde donde le gusta exponer moda realista y consecuente con el clima de nuestro país.
Las imágenes son ella modelando lo que usa en su día a día y que guarda en su clóset. Siempre se ha negado a utilizar ropa que le prestan las tiendas pues su objetivo es ser auténtica.
Para Andrea ser blogger significa aportar algo a la vida de sus lectoras. "Muchas personas creen que la moda es un tema frívolo o superficial, yo considero que es embellecer la parte externa de cada uno y hacer que la gente se sienta bien consigo misma".
Por ello, además del blog ahora ha incursionado en el mundo de la asesoría de imagen y personal shopper. Para ello, se especializó en cursos en línea impartidos por la revista Elle y la Universidad Complutense de Madrid.
"Me gusta ser responsable con lo que hago y tener un respaldo académico. Si bien, muchas cosas uno las sabe por medio de la experiencia, hay otras cosas que aprendí como la teoría del color y qué recomendar a cada tipo de piel".
Actualmente, Andrea vive de su actividad como blogger y los negocios extra que se han derivado del blog. Sabe que su trabajo tiene una influencia e incluso, un precio valioso para las marcas comerciales.
"Investigaciones han demostrado que la gente confía más en lo que les recomienda una blogger, que en lo que recomienda una celebrity", explica. Por ello, la tendencia en la industria de la moda es invertir en estas mujeres influyentes a través de Internet, un negocio que, desde hace dos años, le genera ingresos constantes a esta comunicadora de la moda.