Si tanta atención ponemos muchas en hacer ejercicio, estudiar, alistarnos para salir, ¿por qué no ponerle la misma atención a nuestras partes íntimas?
Como mujeres, es muy importante saber que la presencia de flujo vaginal es algo muy normal. Lo que sí debemos hacer es poner atención a las alteraciones y cambios que pueden indicar un problema.
El flujo vaginal es muy natural y además sirve de indicativo de en qué punto del ciclo menstrual nos encontramos. Además, cumple funciones muy importantes como limpiar y humectar la zona vaginal y crear una barrera protectora para prevenir diferentes tipos de infecciones.
Los colores del ciclo vaginal
Flujo anormal:
- Cada persona tiene su olor particular, pero ojo; si tiene cambios repentinos de olor y más si es desagradable.
- Cambia su color (si se vuelve verdoso, grisáceo o se asemeja al pus).
- Presenta cambios en la textura (espumoso).
- Provoca picazón, ardor, hinchazón o enrojecimiento de la zona vaginal.
- Hay un sangrado que no corresponde al período menstrual.
Una correcta rutina de higiene íntima con agua y jabón -especialmente diseñados para la zona vaginal debido al pH balanceado-, utilizar protectores para una mejor higiene, cambiar toallas (¡y protectores!) tres veces al día y limpiarse de adelante hacia atrás son las principales recomendaciones de los expertos.
También se debe orinar antes y después de las relaciones sexuales. Este aspecto es importante ya que en caso de que haya una infección, todo va directo a la orina.
Fuente: Médica de Saba, Arlyne Carmona.