¿Se equivocó al solicitar las 2.130 entradas a la Asociación Lucha contra el Cáncer Infantil?
Primero que todo quiero aclarar que las entradas que se solicitan no son 2.130, sino que fueron 1.434, que era el acuerdo que se tomó en la Junta Administradora del Estadio. . Si me pregunta cuál era la finalidad de esas entradas, fue una responsabilidad social. El Estadio Nacional es un obsequio de China y con las tarifas actuales –de las entradas– es imposible que las personas de escasos recursos puedan entrar. Pensé, por qué no buscar entradas para los adultos mayores, los discapacitados, los integrantes de la Galería del Deporte, las clases marginales.
¿Debió solicitar permiso a la presidenta antes de pedirlas?
Sí fue un fallo el no haber dicho a la prensa el acuerdo al que llegó la junta administradora de solicitar las 1.434 entradas, y también el no haberlo dicho a la presidenta.
Ricardo Chacón, de 90 Minutos por la Vida, expresó que usted les impuso que tenían que darle los mencionados boletos.
Yo nunca hablé con Ricardo Chacón, con quien hablé, en una ocasión, fue con Maritza Peraza, y ella me dijo que era una barbaridad, entonces le dije, bueno, todos tenemos causas. Le dije que era cuestión de ayudarnos y a ella no le pareció, pero le dije que era una directriz que quería implementar.
Si usted solicitó las entradas desde antes de firmar el contrato, ¿por qué las entidades a las que se les envió estos boletos no sabían nada de ellos hasta un día antes?
Es que a la carrera me entregaron las entradas. Me las dieron el jueves a las 4 p. m. y decidimos que las daríamos el viernes, cuando teníamos ocho horas hábiles.
¿A usted lo saca del gobierno el caso de las entradas o las declaraciones dadas a este medio, de que el fideicomiso no es necesario para administrar el Estadio, siendo un proyecto de la presidenta?
Yo dije que se debía aprobar a la Junta Administradora del Estadio la posibilidad de establecer patrocinadores para que el Estadio pudiera subsistir, no es que estaba en contra del fideicomiso.
Pero usted manifestó que el Icoder podía administrar el Estadio sin necesidad del fideicomiso, ¿ahora cambia el discurso?
Recuerde que dije que lo iba a consultar con la presidenta (Laura Chinchilla), dije que podíamos mantener la junta al frente, pero dándole recursos.
¿Existió división entre usted y el exdirector del Icoder, Luis Peraza, quien por su lado solicitó 3.000 entradas para 90 Minutos por la Vida, según dijo, para albergues?
Él está en el Consejo Nacional de Deportes, y además preside la junta administradora –del Estadio Nacional–, él (Peraza) lo hizo a título personal, gracias a Dios tuvo la honestidad de responder que fue a título personal.
¿La solicitud que hace Peraza sí es una equivocación?
Por supuesto porque fue una decisión unipersonal, lo mío se planteó –en la Junta Administradora– y se aprobó, pero de eso a pedir 3.000 entradas a título personal hay kilómetros de distancia, fue sin argumento ni planteamiento.
¿Usted dio la orden de que en el Estadio Nacional no se diera información a la prensa?
No tengo la potestad sobre la gente del Estadio Nacional, las actas de la junta administradora son públicas, cualquier persona puede solicitarlas.
El ministro de la presidencia, Carlos Ricardo Benavides, manifestó que usted sabía que las prioridades eran el fideicomiso y la Ley del Midepor, y no el Estadio.
No tuve ambición en el Estadio Nacional, si la hubiese tenido habría estado inmerso en los conciertos y partidos que se dieron, pero vea que mi primera recomendación fue la del congelamiento de entradas por cada actividad. No sabía que la primera actividad que debía dar esas entradas era los 90 Minutos por la Vida. Si hubiera estado enamorado del Estadio Nacional me habría metido en todo.
Pero usted fue quien dio declaraciones cuando se presentaban problemas por excesos de actividades y partidos, y cuando se dio la rotura en la pista sintética.
A quien llamaba la prensa (cuando eso pasaba) era a mí.
Según lo que usted dice, pudo enviar a la prensa al Icoder.
Pero yo soy (era) la cabeza y le dije a Luis Peraza que vamos a hacer correcciones, le dije que eso no tiene que volver a pasar.
¿Entonces sí estaba metido en las operaciones del Estadio?
No podía estar ausente, soy (era) el ministro y debía tener comunicación con el administrador (Peraza) de todas las instalaciones deportivas de este país, pero eso no significa que estoy al frente (del Estadio).
¿El involucrarse tanto desvió sus prioridades como ministro?
No señor. A mí me cuesta el puesto pensar en entradas para personas con pocos recursos.
¿Su salida fue injusta?
Creo en lo que dije, y si la causa –de la salida– es justa o no, eso solo el tiempo lo dirá. Tuve la utopía de que todas las personas tienen derecho –de ingresar al Nacional–.