Nadador tico, de romper récords en Juegos Nacionales a competir en Mundial y Panamericanos

El paso perfecto en la piscina del Polideportivo de Cartago no fue extraño para quienes conocen a este joven atleta de 19 años, quien a lo largo de varios años ha destacado.

Las cinco medallas de oro colgadas en el pecho fueron el final perfecto, porque se trataba de sus últimos Juegos.

Pese a ese dominio, Álvarez no estaba en el nivel más importante de la temporada, porque eso lo está buscando para otro momento.

"Por dicha me despedí de buena manera. También logré romper tres récords de Juegos Nacionales (200 mariposa, 200 combinado y 50 dorso). Bastante contento con los resultados, en primera instancia era aportarle la mayor cantidad de medallas a Belén y lo demás viene por añadidura", comentó.

El torneo más importante, según mencionó Álvarez, son los Juegos Panamericanos de Lima, Perú. Sin embargo, antes de eso, estará en el Mundial de Natación.

El nadador viajó este lunes hacia la ciudad de Gwangju, en Corea del Sur. Lo hizo junto al entrenador de la selección, Pablo Camacho, y dos ticos más: Amanda Alfaro (18 años) y Arnoldo Herrera (22 años).

Los tres van con la mentalidad de mejorar sus tiempos en el campeonato más importante de la natación a nivel mundial.

Ahí estarán hasta el 28 de julio, cuando regresan a Costa Rica. Él y Herrera permanecerán en el país durante una semana y después viajarán a Lima, para los Panamericanos.

Ese será el cierre de casi dos meses entrenado a tope, primero para representar a Belén en un ambiente de Juegos Nacionales que dominó y después para ponerse los colores blanco, azul y rojo, ante las potencias mundiales.

“Juegos me ayudó para tomar ritmo, porque antes de eso tenía bastantes semanas o meses de no competir bien; estos torneos sirven de mucho fogueo para Lima. Aquí a nivel nacional gracias a Dios mis pruebas sí las logro dominar, tengo los tres récords absolutos de 50, 100 y 200. Siempre han sido mis pruebas y me ha ido muy bien”, agregó.

En Corea del Sur competirá en 200 y 100 mariposa, Herrera estará en el 100 y 200 pecho y Alfaro en 200 y 400 libre.

Este será el segundo mundial de Herrera y Álvarez.

"Lo tomo con calma, recuerdo mi primer mundial juvenil, en Singapur, los nervios eran impresionantes, ahora he ganado experiencia, sé cómo canalizarlos, entonces con más calma", dijo el único nadador tico que recibe ayuda económica de la FINA (Federación Internacional de Natación).

Metas. El entrenador de la Selección explicó que la preparación ha sido lo “más responsable posible y seria” y con la idea de dar un paso más en la carrera de los tres nadadores.

"El objetivo es ir a buscar mejorar marcas personales en sus pruebas", mencionó.

Álvarez cuenta que lo que se topan en el Mundial es “de otro nivel”, al estilo de las mejores potencias.

"Es algo impresionante, una vez que los nadadores salen de la piscina hay doctores listos para sacarles sangre y ver dónde andan sus niveles de ácido láctico y ver cuánto tienen que comer y así. Es algo que uno se queda asustado", dijo.

En los Panamericanos la historia no es muy diferente y lo ideal para Bryan y Herrera será avanzar a semifinales. Eso sería casi un triunfo para los nacionales.

“Van 41 países, entre ellos superpotencias mundiales en natación: Estados Unidos, Argentina, Canadá, Brasil. El nivel es sumamente elevado”, dijo Álvarez.

Esta no será la primera vez que se enfrente a una agenda tan apretada, por lo que sabe que el cansancio no es solo físico.

"Es físico y mental, porque por más que uno diga que son dos pruebas y ya, los viajes son agotadores, cambios de horario y también el esfuerzo pos competencia. Es un mes y resto que debemos darle durísimo", apuntó.

Actualmente Bryan estudia Ingeniería Industrial, pero lo lleva con clama y en este momento está dedicado 100% a la natación, gracias a becas de la FINA y el Icoder.

“La FINA da esa beca a muy pocos países del mundo, si no me equivoco son como 30, la dan a personas jóvenes con opción para olimpiadas”, explicó.