Sebastián Chaves Quirós es el nombre de un joven de 12 años que participa como jugador de tenis de mesa por Desamparados en los Juegos Deportivos Nacionales. Tiene cuatro años de practicar este deporte y es el primer atleta en silla de ruedas que compite en esta disciplina en las justas.
Sebastián cursa el sexto grado de primaria y, además de estudiar, entrena de lunes a viernes de 5 p. m. a 7:30 p. m. en Las Gravilias, por lo que debe acomodar su horario para cumplir con todas sus responsabilidades, algo que se le dificulta, porque estudia en el colegio Porvenir de Desamparados, que tiene un horario rotativo (en ocasiones de día y en otras por la tarde).
Él padece espina bífida, por lo que ha tenido que pasar en varias ocasiones por el quirófano.
“Al principio, un tío me llevó a ver a otros jugar tenis de mesa y me enamoré. Me siento bien de ser el primer deportista que participa en silla de ruedas. He participado también en la Copa Costa Rica y otros torneos”, expresa Chaves.
Dicha competición es de tenis de mesa paralímpico, pues todos los participantes padecen alguna discapacidad, incluyendo jugadores de otros países. En Juegos Nacionales, sin embargo, compite contra niños sin ninguna discapacidad. En su casa, suele jugar contra su hermano, Gabriel Chaves, quien no tiene discapacidad, está en la categoría sub-11 y ya acumula dos medallas de bronce en estas justas y ocho en total; es seleccionado nacional de su categoría.
Su madre, Marcela Quirós, los acompaña en estos Juegos. Ella se siente orgullosa de que su hijo tenga la oportunidad de practicar la disciplina que adora.
“Gracias a Dios escogimos esta disciplina, porque no son todos los deportes los que puede practicar una persona en silla de ruedas. Sebastián es el único niño en silla que practica tenis de mesa en el Comité de Deportes de Desamparados”, señala Quirós.
No tuvieron problemas para convencer a los demás que le permitiera al joven entrenar, según su madre.
Chaves compitió en individual y mixto, este martes. Aunque fue eliminado, aún tiene opción en la categoría por equipos.
Este adolescente y su madre están instalados en el Colegio de La Villa hasta el viernes.
“Yo me encargo de bañarlo, de su aseo personal, de sus cosas y de cuidarlo y todo muy bien. Él come solo, él se lava los dientes. Yo trato de ayudarle, pero también intento que sea independiente, pero él se sube y se baja de la silla solo, hace sus deberes diarios solo. Yo nada más le ayudo, lo llevo y lo recojo de la escuela, pero trato de que él sea independiente para que pueda enfrentar lo que se viene”, explica su mamá.
Este joven quiere dedicarse 100% al deporte, incluso tiene mesa de tenis en su casa.
El entrenador del equipo de Desamparados, Alonso Sánchez, tiene cinco años de estar al frente del proceso y explica en qué se diferencia el entrenamiento de él al de los demás.
“El equipo comenzó como uno convencional, pero se fue agregando población con discapacidad. Sebastián fue el primero que se integró, pero ya tenemos varios, aunque él es el único en silla de ruedas. El entrenamiento para él es diferente en dos sentidos: cuando juega con convencionales, hay que enseñarle a hacer un tipo de juego, y cuando juega en paralímpico, el tipo de entrenamiento varía porque en un partido de silla contra silla son diferentes los efectos", explica el entrenador.
“Por ejemplo, cuando él juega contra una persona que no tiene discapacidad, él tiene que jugar rápido, fuerte, sacándolo a movimientos; pero cuando juega contra alguien en silla, debe jugar angulado, con efectos cortos para que el rival no alcance. Eso quiere decir que puede poner bolas altas cerca de la net, que el de silla no va a llegar. Si hace lo mismo contra un convencional, le va a pegar un remate fuerte”, detalló.
El preparador se siente feliz y orgulloso de saber que tiene personas con discapacidad en el equipo de Desamparados.
“Para mí es el orgullo más grande tener a los chicos de todo el equipo que están ahí haciendo deporte y se están formando, y tener personas con discapacidad, que los sacamos de una zona donde son cobijados en una burbuja y no los dejan salir, o tienen miedo a que salgan y se lastimen; al estar en el equipo, ellos mismos van teniendo una independencia que los hace fuertes. Estamos haciendo un trabajo que no todos los comités cantonales hacen”, dijo.
En estos Juegos Nacionales, el tenis de mesa cuenta con varios atletas con alguna discapacidad, representantes de San Carlos, Pérez Zeledón y Esparza, aunque solo Sebastián Chaves en silla de ruedas.