Saint-Pierre, La Reunión (AFP). A una semana de su debut en el Mundial de Sudáfrica-2010 ante Uruguay, la selección de Francia buscará ante la modesta China, el viernes en Saint-Pierre de isla La Reunión, despejar dudas y ganar confianza en su último amistoso de preparación para la Copa del Mundo de Sudáfrica.
Los Bleus necesitan amoldarse al nuevo sistema de juego que aplicará en el Mundial, donde su goleador histórico Thierry Henry tendrá que conformarse con el papel de “suplente de lujo”, según sus propias declaraciones y lo mostrado por el técnico Raymond Domenech en prácticas y amistosos.
El 4-3-3 nacido en Tignes, en los Alpes franceses, llevó entusiasmo a la afición del vigente subcampeón mundial en su primera salida premundialista contra Costa Rica, en Lens (victoria 2-1).
Sin embargo, el último domingo dejó muchas dudas cuando Francia apenas arrancó un empate contra Túnez (1-1) y el modelo con tres delanteros mostró limitaciones y mucha vulnerabilidad defensiva.
La zaga central aún está en formación. Desde el final de la Eurocopa-2008, que terminó en fiasco en primera ronda, los Bleus jamás repitieron el par de centrales, aunque está situación podría detenerse el viernes si William Gallas, que el miércoles salió de la práctica con dolores estomacales, se asocia a Eric Abidal.
Contra los asiáticos la consigna gala es clara y la enuncia el atacante Djibril Cissé: “Ante China, se necesita volumen de juego, goles, la victoria y así ganaremos confianza y estaremos mejor de la cabeza”.
Para Gallas (80 selecciones) este duelo de preparación es importante dentro de su programa de recuperación.
Luego de haberse curado de una lesión en la pantorrilla izquierda, que lo tuvo entre algodones durante la dura preparación en Tignes, el Gunner había jugado 45 minutos contra los costarricenses y una hora frente a los tunecinos (marcó el gol del empate antes de salir).
El plan de Domenech era que jugase un encuentro completo contra los asiáticos, el viernes.
Abidal, que tuvo responsabilidad en los dos goles que encajó Francia en esta etapa de preparación, deberá abandonar sus reflejos de lateral izquierdo, puesto en el que militó toda la temporada en el Barcelona.
Pero la defensa no es el único punto que le trae dolores de cabeza a Domenech.
El ataque parece tener la pólvora mojada, ya que ante la Tricolor, el primer gol francés fue anotado en contra por un costarricense y el del triunfo por el debutante Mathieu Valbuena al final del partido, mientras que ante Túnez el defensa Gallas sacó las papas del fuego con un cabezazo tras centro de Gourcuff.
El balance es pobre, sobre todo con un equipo en cancha con cinco jugadores de vocación ofensiva: Gourcuff, Malouda, Govou, Anelka y Ribéry.
Si no mejora ese rango contra una débil China (84 de la clasificación FIFA) que pretenderá no encajar una goleada histórica, Francia podría tener muchos problemas para pasar la primera ronda del Mundial-2010, donde afronta un grupo A parejo, con el anfitrión Sudáfrica, México y Uruguay.