La Sabana
La Comisión Antidopaje le impuso la tarde de este miércoles un año se sanción al ciclista Marco Salas y 12 años a Steven Villalobos por doparse en la pasada Vuelta a Costa Rica. Ambos pedalistas estuvieron en esa competencia representando al equipo Coronado-Hotel Los Lagos-Bufete G&A.
El caso de Steven es reincidente, ya que en 2010 también salió posotivio en una prueba de doping, por este motivo la pena fue de 12 años de inactividad.
Steven pudo ser castigado de por vida, sin embargo el presidente de la Comisión Disciplinaria de la Federación Costarricense de Ciclismo, Roy Sancho, indicó que el castigo fue de 12 años por la apertura que él tuvo para confesar el tema.
El jerarca argumentó que una sanción vitalicia lo dejaría sin practicar cualquier deporte competitivo y lo marca de por vida ante la sociedad.
Por su parte, a Marco Salas le impusieron un año ya que no consumió la sustancia deliberadamente sino que la contrajo por una relación sexual con su esposa.
“Yo entiendo la sanción y ya expuse como fue que esa sustancia apareció en mi cuerpo, pero que ellos (la Comisión) digan que se me está castigando por falta de comunicación con mi pareja me parece risible. Yo defiendo mi inocencia porque no tuve intención de doparme y trataré de llevar esto hasta las últimas consecuencias”, indicó Salas.
Con esta sanción se cierra el capítulo de los cinco pedalistas dopados en la pasada Vuelta a Costa Rica con la sustancia GW501516. Los otros tres fueron Paulo Vargas, Pablo Mudarra y Allan Morales, todos del BCR Pizza Hut, quienes fueron sancionados por dos años.