Uno con 130 kilómetros de trabajo –en la semana–, el otro con 270, uno maratonista, el otro triatleta, uno con la marca olímpica en el horizonte, el otro dispuesto a ayudarle para hacerla.
Y así corrieron, César Lizano adelante, dominante y veloz, y Leonardo Chacón a solo unos metros, amenazante.
Pese a que fue Lizano, con 33:10 minutos, quien ganó, y que Leo llegó ocho segundos atrás, la historia recordará la San Silvestre de ayer como un duelo de colosos de diferentes disciplinas, pero iguales en coraje.
Desde el arranque, con más de 6.000 personas atrás, César y Leo se enfrascaron en esa lucha personal que iniciaron hace un año, cuando Chacón le quitó a Lizano el triunfo en el cierre.
Solo pasaron dos kilómetros para que el “pleito” de los 10,4 kilómetros de recorrido fuera entre ellos, aunque cabe destacar que Gustavo Mora, quien corrió la distancia de cinco, condimentó el trayecto con velocidad pura, “jalando” a los dos protagonistas.
Tras subir el bulevar de Rohrmoser parecía que Hibert Mora, compañero de entrenamiento de Leo, le ayudaría a atacar, pero Mora solo duró unos metros.
A la altura de La Sabana, por la Agencia Datsun, ya con Gustavo en la meta, Lizano y Chacón comenzaron su duelo personal, alternándose la punta, y, a veces juntos, codo a codo, con un ritmo de hasta 3:10 minutos por kilómetros, excelente para una prueba quebrada como la San Silvestre.
Con Leo, del equipo Banco Lafise, a su lado, César, de Scotiabank, no quiso vivir lo de hace un año cuando este le ganó el cierre; lanzó dos ataques, feroces.
El primero, por la Contraloría, fue contenido, mas el segundo, llegando al Ministerio de Agricultura, acabó con el triatleta, quien ya no pudo responderle.
Tras pasar seis semanas en Estados Unidos, preparándose para la Maratón de Houston, donde este 17 de enero buscará la marca olímpica (2:19 horas), Lizano se mostró fuertísimo; bajó hasta la Jack’s y subió a la meta sin que Chacón pudiera llegarle.
Así lo reconoció Leo –clasificado para Río–, quien al final llegó ocho segundos atrás, eso sí, mejorando por 24 segundos el tiempo del 2014, algo bastante positivo.
“Ayer mi entrenador (Cliff English, canadiense) me dijo que tenía que correr más rápido –que el año pasado–. Así de simple, si es el mismo recorrido hay que correr más rápido, y gracias a Dios bajé casi 30 segundos”, dijo Chacón.
Para el triatlonista, quien esta semana hizo 200 kilómetros de bici, 50 de carrera y 17 de nado, su balance es satisfactorio porque se puso a la par de Lizano.
“César está más que listo para la marca olímpica, hoy (ayer) salí a ganar, pero me voy contento, bajé 26 segundos mi tiempo”, expresó Leo Chacón al terminar.