El ciclista costarricense Andrey Amador (Movistar Team) sufrió un percance este viernes en la clásica belga E3 Harelbeke que lo envió al hospital, para conocer las secuelas.
A falta de 100 kilómetros para la meta se produjo una montonera en la que dos tercios del pelotón terminaron en el piso.
El tico no fue de los primeros hombres que cayeron, sino que al producirse ese drama en carretera, en un segundo se percató de que todos los pedalistas que iban delante estaban en el suelo.
“Frenamos de golpe, un ciclista me dio por detrás y me golpeó en la zona de las costillas”, relató Amador a La Nación.
La embestida fue fuerte y quedó muy golpeado.
De hecho, no sabe cómo hizo para poder terminar la carrera, aguantando un dolor insoportable.
El nacional llegó a la meta en el puesto 85, en un lote donde iban sus compañeros Jorge Arcas, Héctor Carretero y Mikel Landa, quienes también se vieron involucrados en el incidente.
Ellos cruzaron la meta a 14:05 del neerlandés Niki Terpstra (Quick Step), quien se dejó la victoria.
De ahí se lo llevaron al Hospital Universitario de Gante, donde le practicaron las radiografías de rigor.
Tras un largo rato de incertidumbre, a Amador le dieron la buena noticia de que no hay fractura en sus costillas.
Sin embargo, le duele respirar, toser y realizar cualquier pequeño esfuerzo.
Pese a que las placas no muestran ningún hueso roto, dentro de unos tres días se realizará una resonancia, para determinar si presenta alguna fisura.
“Es demasiado incómodo y tengo cólera, porque me siento muy bien en la bicicleta y la suerte no me acompaña, o bueno, quizás sea buena suerte y que al final solo tenga esto, porque en este tipo de carreras hay muchas probabilidades de irse al suelo”, indicó Amador.
Hace tres años, en esta misma carrera, el tico se cayó y se fracturó el codo.
Su próxima competencia en agenda estaba apuntada para el domingo, la Gent-Wevelgem, y para el miércoles tenía la Dwars door Vlaanderen. Y eso queda ahora en suspenso, porque tiene mucho dolor.
Al tico ya le dijeron que esperarán hasta este sábado y si sigue igual, tendrá que regresar a Barcelona para que le practiquen un TAC.
"Con eso es como se encuentran las fisuras, que son muy molestas", finalizó Amador.