En un día que fue una tortura para muchos, Andrey Amador mostró su fortaleza y mejoró diez puestos en la clasificación general del Giro de Italia.
La segunda etapa de la competencia se disputó sobre 177 kilómetros entre Albenga y Génova, con un recorrido plano, lleno de tensión, velocidad, curvas, peligro y múltiples caídas.
Fue una carrera loca, de esas en las que la suerte juega un papel importante, pero en la que también sale a relucir quiénes son los hombres que están para dar espectáculo durante las tres semanas de competencia, como Amador, quien pasó de la casilla 35 a la 25 en la tabla acumulada.
“Fue un día difícil con tensión y caídas”, manifestó Andrey Amador, quien también aseguró que todos sudaron la gota gorda con el calor que imperó.
“Estoy contento porque al final hemos podido librar tanto con los hombres de nosotros para la general como estando con salud. La única pena ha sido Dayer (Quintana) que se ha caído, pero sin problemas”, aseguró el tico en su página electrónica.
Lo caótico del cierre, en un circuito muy estrecho no solo castigó a varios ruteros que se fueron al piso, pues provocó que la llegada masiva fuera desordenada.
A pesar de que Astana y Tinkoff Saxo buscaron el triunfo a toda costa, el más astuto fue Elia Viviani (SKY), quien ganó en un sprint agónico con 4:13:18, mismo tiempo que registró Andrey Amador en el puesto 76.
Los hombres de Orica GreenEDGE no lograron acomodarse bien en la llegada, pero aún así conservan el liderato, con la salvedad de que la ‘maglia rosa’, que estaba en manos de Simon Gerrans, pasó a Michael Matthews.
Hoy se correrá la tercera etapa del Giro con 136 kilómetros entre Rapallo y Sestri Levante, una jornada de media montaña.