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23/09/2012. La guacima Alajuela. 3ra fecha de automovilismo. en la fotografa: CATEGORIA ST: 8 Emilio/ Roy Valverde ./Pablo MONTIEL (Pablo Montiel.)
La dinastía de los hermanos Valverde se extiende a un cuarto año tras coronarse ayer campeones en la categoría Super Turismo del Motorshow, a pesar de que queda aún una fecha para el final del torneo.
Un tetracampeonato se convierte en una monarquía cuyo poder nace desde un taller familiar dirigido por el expiloto Roy Valverde, la posible clave de su éxito.
Los hermanos Valverde ya son ícono en La Guácima pero este campeonato demuestra que cada año es más difícil mantener su hegemonía.
Nuevas fuerzas externas, como el piloto Daniel Muñiz, o internas, como sus compañeros en Castrol, Tomás Quirós y Óscar Badilla, los retaron este año para dar más competencia sobre el asfalto.
“Este ha sido el campeonato más duro que hemos logrado”, aseveró Emilio Milo Valverde.
Y la fecha de ayer no fue la excepción, a pesar de que los hermanos solo requerían no perder la ventaja de 63 puntos con la que llegaban; los otros pilotos querían extender la lucha hasta la última jornada.
“Queríamos mantenernos en la lucha, darles pelea hasta el último día como lo hemos venido haciendo”, declaró Tomás Quirós.
El primer heat mostró esa intención de no rendirse, el resto de pilotos no dejaron que Emilio se recuperara de una incursión en el zacate y lo relegaron al cuarto puesto al llegar a la meta.
Esto dio esperanzas a Daniel Muñiz, que finalizó en el segundo puesto, pero Tomás Quirós no aprovechó y quedó sexto.
En el segundo heat, Roy aprovechó la parrilla invertida, y finalizó primero, un perfil del resto del día.
La tercera largada fue la salida de la lucha de Daniel Muñiz. El piloto sufrió un desperfecto mecánico y quedó en el puesto 18.
Los hermanos Valverde finalizaron en la novena casilla y esto provocó que el panorama de los demás competidores se nublara tanto como el cielo que ya indicaba la llegada de la lluvia.
El agua trajo consigo desgracia a Muñiz y el equipo de Quirós y Badilla en el cuarto heat.
El otro equipo de Castrol tuvo un problema con su auto, debió ingresar a pits y perdió toda posibilidad de llegar al podio, mientras que Muñiz nunca se recuperó de la postrera posición en que partió.
Fue entonces cuando la lluvia dijo basta, sus gotas no dieron piedad a todos los competidores que derrapaban y se salían de la pista.
La bandera roja se asomó por el balcón mientras los Valverde, sin competencia, iban en el primer puesto. Esto le dio 30 puntos a los hermanos, que bajo un aguacero celebraron su cuarta corona.
