Ubicado junto a su aeronave, Carlos Dárdano esperaba a los gerentes de la hidroeléctrica para dar el servicio de taxi aéreo que le habían contratado.
Era el 19 de enero de 1982, Dárdano, en ese entonces de 25 años, aguardaba a la par de la cabina cuando una bala le impactó la parte izquierda de la cara.
Con la sangre bajando por el rostro a borbollones, él no pensó en otra cosa que en salvar vidas: llamó a los gerentes, encendió el motor y salió del sitio donde la guerrilla salvadoreña le quitó su ojo izquierdo y perforó su avión con cinco impactos de bala.
“Cuando te están volando bala, como decimos en mi país, las cosas cambian, no pensé en dolor, sino en salir de ahí con las personas que estaban en tierra”, dijo Dárdano ayer en el hangar 14 del aeropuerto Tobías Bolaños.
Hoy, a los 57 años, este cuscatleco, piloto de la antigua TACA y ahora en Avianca es uno de los seis acróbatas que estarán en el Air Show que se realizará este domingo en Puntarenas.
Dicho evento, organizado por la empresa RPM TV, trae a los estadounidenses Gary Ward, Ken Rieder y Jon Thocker, al canadiense Jason Newberg, al azteca Javier Romo y a Dárdano.
De estos, 24 son del grupo de operaciones especiales, 46 cadetes de tránsito y 34 voluntarios.
Este último, considerado uno de los mejores pilotos de Latinoamérica, tiene 34 años de volar, es esposo, padre de dos hijos, abuelo y posee una escuela de manejo y mecánica de aeronaves.
“Había mal tiempo y de pronto se apagaron los dos motores debido a una falla interna, era un avión nuevo, apenas hacía el segundo vuelo”, recordó Dárdano.
“Faltaban 25 millas (40 kilómetros) para arribar al aeropuerto y no llegábamos, así que íbamos a acuatizar cuando de pronto la mano de Dios hizo que apareciera un gramal junto a un canal de agua, ahí pudimos aterrizar.
“Tenía que salvar a las personas y estaba en juego la credibilidad de TACA y de los pilotos latinoamericanos, fue un milagro”.
Con humildad propia de grandes personajes, Dárdano invitó al Air Show, en el que podrán ver volar a este héroe de guerra.