La Nochebuena se le adelantó cuatro días al Invierno 2014. El título aguarda como desahogo para una de dos aficiones acostumbradas a sufrir en los diciembres de la década. Saprissa o Herediano, alguno saboreará –al fin– una feliz Navidad.
La S no gana un título en diciembre desde el lejano 2008, cuando aún se le llamaba Apertura al campeonato. Desde entonces, los morados ven cada final de Invierno entre la amargura de la eliminación temprana.
Por su parte, el Team urge de una remontada con tinte histórico (carga con un global de 4-2 en contra) para acabar con esa pesada maldición de cuatro finales de Invierno perdidas de forma consecutiva.
Los aficionados ya disfrutaron de un primer plato cargado de goles y emociones, el domingo en la Cueva . El obsequio final se plasmará esta noche en el Rosabal Cordero, desde las 8 p. m., pero solo habrá un ganador.
Es, como toda final, un duelo con hambre de historia. Las ansias de bicampeonato de este Saprissa se miden a la necesidad del Herediano de mostrar que puede ganarle a un grande en una final (ha perdido seis finales de torneos cortos: una contra el Monstruo , una contra Liberia Mía y cuatro seguidas contra Alajuelense).
Olvidar las tribulaciones. ¿Quién pensaría que Saprissa sería hoy el favorito al título? Hace un par de semanas, muy pocos. Fuera del espíritu combativo, los morados tenían muy poco a su favor al llegar a semifinales: una mala defensa, caos en la portería, problemas de definición y una irregularidad pasmosa.
Pues todo eso Saprissa lo dejó atrás para eliminar a la Liga y, si hoy sale como campeón, de este equipo solo se dirán alabanzas.
Y es que es realmente inusitado que un cuarto lugar ascienda hasta el trono. En la historia de torneos cortos, desde 2007, siete veces el primer lugar ha salido campeón. Solo tres equipos han llegado como cuartos a la segunda fase para ganar las últimas dos series cerrando de visita: Liberia Mía (Verano 2009), Brujas (Invierno 2009) y Herediano (Verano 2012).
Festejo aguardado. De esas derrotas decembrinas dos veces al Herediano le tocó servir la mesa para otro. Dos veces la Liga ganó el Invierno en el Rosabal...
Los golpes del pasado pesan y duelen: desde que el Team dejó de ser el club con más títulos en el país, en 1999, nunca le ha ganado una final a un equipo con más cetros en la vitrina.
Remontar dos goles, más esos fantasmas del pasado, es lo que está en juego para un Herediano que acumula experiencia de finales como ninguno.